Nueva polémica en Buckingham

Enrique de Inglaterra amenaza con llevar a los tribunales al Gobierno británico

El duque de Sussex insiste en que no es seguro que él y su familia viajen al Reino Unido mientras no se les reestablezca la protección con seguridad oficial

Reina de Inglaterra, Harry y Meghan

Reina de Inglaterra, Harry y Meghan / GETTY IMAGES / MAX MUMBY

Laura Estirado

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Sigue el tira y afloja entre el príncipe Enrique y su familia y el Gobierno Británico. Desde que el hijo pequeño de Carlos y Diana y su esposa, Meghan Markle, decidieron abandonar sus funciones reales e instalarse en Estados Unidos se inició una batalla con la reina Isabel II que aún se agravó más con la polémica entrevista que los duques de Sussex concedieron a Oprah Winfrey, en la que, entre otras cosas, soltaron que alguien en Buckingham preguntó por el color de piel que tendría su hijo Archie antes de su nacimiento. Desde entonces la relación de Enrique con su familia se ha ido deteriorando, y los últimos acontecimientos no ayudarán a tender puentes. Y es que, la prensa británica informa de que Enrique amenaza con llevar a los tribunales al Gobierno británico, que tomó la decisión de no pagar la seguridad policial del príncipe y su familia cuando estuvieran en el país.

En realidad, fue la reina quien ordenó retirarles el equipo de seguridad cuando los duques decidieron alejarse de la casa real y establecerse en Los Ángeles. Consideró que la ciudadanía no entendería que se siguiera pagando con dinero público este servicio a miembros no activos de la corona que ni siquiera vivían en suelo británico. Entonces, Enrique solicitó la posibilidad de costear de su bolsillo esa protección que le garantizaría seguridad a él y a su familia cuando visitaran su país de origen. Tras la negativa del Ministerio del Interior ante esta propuesta, el príncipe podría emprender acciones legales contra el Gobierno. De momento, ha enviado un aviso, en forma de carta al ministro de Interior: un 'protocolo previo a la acción', en la que solicita que se le asigne un equipo de protección.

Sin protección no volverán

Después de que 'The Mail on Sunday' publicara la noticia de esta nueva batalla legal en la familia real, un representante del príncipe ha emitido un comunicado aclarando la situación. Según afirma, el objetivo del duque de Sussex es "garantizar su seguridad y la de su familia mientras se encuentra en el Reino Unido para que sus hijos puedan conocer su país de origen" (Lilibet, la hija pequeña de los duques de Sussex, de siete meses de edad, aún no ha viajado al Reino Unido para conocer a su familia). Sin esta protección, asegura, no pueden volver a su hogar. El príncipe ha contado con un equipo de guardaespaldas privados estadounidenses desde 2020, pero sus representantes legales señalan que este equipo no tiene jurisdicción en el extranjero ni acceso a la información de inteligencia del Reino Unido, necesaria para mantenerlos a salvo.

Y en el escrito citan un incidente ocurrido en julio de 2021 en el que, aseguran, su seguridad se vio comprometida. Fue cuando Enrique viajó para inaugurar la estatua de su difunta madre, la princesa Diana. Durante la visita, su seguridad se vio "comprometida por la ausencia de protección policial" al abandonar el acto. Tal como publicó 'The Guardian', su coche fue perseguido por paparazzi.

"Con la falta de protección policial, surge un riesgo personal demasiado grande. El príncipe Enrique espera que su petición, después de casi dos años de súplicas por la seguridad en el Reino Unido, resuelva esta situación", agrega el comunicado.

En la misma nota, se insiste en que Enrique está dispuesto a cubrir con el coste de esta protección policial en lugar de cargarla al contribuyente, si bien también recuerda que otros miembros de la realeza que se han distanciado de la corona siguen contando con este servicio porque "tienen un riesgo de amenaza inherente", por lo que "reciben protección sin coste alguno para ellos".

Más dolores de cabeza para Isabel II

Después de tener que despojar, la semana pasada, al príncipe Andrés de los honores y patrocinios militares por estar procesado en Estados Unidos en un caso de abusos sexuales a menores relacionado con el magnate y pederasta Jeffrey Epstein, este caso supone un nuevo dolor de cabeza para Isabel II, ya que los planes de Enrique supondrían primera vez que un miembro de la familia real presenta un caso contra el Gobierno de Su Majestad.