Revuelo mediático
The Black Alien se amputa dos dedos: “Estoy feliz”
Lo anunció en una entrevista en El Periódico y acaba de cumplirlo en México. Este francés con sede en Barcelona lleva 7 años transformándose en alien. Solo ha llegado al 34% de su “evolución”
Ana Sánchez
Periodista
En vez de “¿cómo estás?”, a ella le preguntan “¿que has hecho qué?”. No sabe cocinar, pero sí tirar hachas. Si le haces una pregunta retórica, lo más probable es que la responda. Autora de ‘Barcelona increíble’ (Ediciones B).
Lo anunció hace apenas dos meses en una entrevista con El Periódico. En noviembre –aseguró entonces The Black Alien- se amputaría cuatro dedos: el meñique y el anular de cada mano. Acaba de empezar a cumplirlo en Guadalajara (México). Ya está enseñando en Instagram su mano izquierda con tres dedos, con el correspondiente revuelo mediático. Ha salido hasta en el 'New York Post'. “Estoy feliz”, ha declarado a este diario a través de su representante. “Preparándome para la otra mano”, ha añadido en Instagram.
Nombre terrícola: Anthony Loffredo. En las redes lo tutean como “Antonio”. Francés con sede en Barcelona. 33 años. Lleva siete transformándose en alien. Hace año y medio que lo detalla en Instagram. Ya le sigue una legión de fans y 'haters': 766.000.
A estas alturas, tiene la lengua bífida y verde, la mirada inyectada en tinta, implantes bajo la piel, tatuajes hasta donde alcanza la vista. Se ha cortado la nariz y las orejas. En julio se afiló los dientes y se extirpó la mitad del labio superior. Tras amputarse dos dedos de la mano izquierda, apenas ha llegado al 34% de su “evolución”. Así la denomina. “Para mí esto no es mutilar –decía en la entrevista con El Periódico antes de viajar a México-. Para mí es una evolución. Es mi evolución. Para mí es algo… estético. Porque al final, yo me encuentro mejor”.
Tras publicar las fotos en Instagram, ha recibido el correspondiente aluvión de ánimos, insultos y amenazas. "Lo normal en The Black Alien Project, desafortunadamente", lamenta el mánager de Anthony. "Pero es solo en internet", puntualiza. "No tiene ningún problema en México".
Desde que anunció que se cortaría los dedos, el debate virtual se ha encarnecido: “Que tus modificaciones para un aspecto extraterrestre –le dicen- no te compliquen la vida terrícola”. “Yo –replicaba a través de este diario- me acostumbro a cada modificación. De verdad. Yo me acostumbro a todo”. Pero ya es una cuestión de utilidad –se lo repiten cada día sus seguidores-: ¿cómo entrenará?, ¿cómo cogerá las pesas? “A mí me gusta poner a prueba mi cuerpo con nuevas experiencias –respondía él-. El cuerpo se acostumbra a todo”. ¿No le da miedo? “No, de verdad que no. Es el proceso de mi proyecto”.
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