Mala publicidad

Bruce Springsteen, cazado ebrio al volante

La policía pilló al Boss en noviembre pasado y Jeep retira un anuncio con él que solo ha durado cuatro días

Springsteen, en el anuncio de Jeep

Springsteen, en el anuncio de Jeep

Ricardo Mir de Francia

Ricardo Mir de Francia

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Bruce Springsteen no hace anuncios publicitarios. No está en venta ni se alquila, como mínimo desde 1974, cuando se prestó para leer jocosamente una promoción de vino en una radio local de Filadelfia poco antes de lanzar el ‘Born to Run’ y convertirse en un fenómeno de masas. Una máxima que se quebró en la pasada Super Bowl, en la que protagonizó un anuncio de Jeep. El rockero de Nueva Jersey se fue hasta una capilla en Lebanon (Kansas), situada en el centro de la geografía estadounidense, para lanzar un mensaje de unidad tras los últimos cuatro años de extrema polarización política. “Nuestra luz siempre ha encontrado un modo para colarse entre la oscuridad. Y hay esperanza en el camino que tenemos por delante”, decía ‘Boss’ en esos dos minutos vestidos con su inconfundible imaginería. 

A la postre, quizás no fuera la mejor idea porque el anuncio ha durado tan solo cinco días en antena. Jeep ha suspendido temporalmente su emisión después de que se conociera que el músico de 71 años fue arrestado el pasado 14 de noviembre en un parque natural cerca de su casa, acusado de conducción temeraria bajo los efectos del alcohol y consumo de alcohol en una zona no autorizada, según el National Park Service. El fabricante de coches no ha querido pronunciarse hasta que se esclarezcan los detalles del incidente, pero no ha dudado en cubrirse las espaldas mientras tanto. “La conducción bajo los efectos del alcohol nunca se debe condonar”, ha dicho uno de sus portavoces.

Springsteen no es un santo, pero tampoco es conocido por ser un bebedor con problemas de alcoholismo, como sí lo fue su padre. Y a medida que se van conociendo detalles de lo sucedido, todo parece ser menos escandaloso de lo que sugieren los titulares de las últimas horas. Varios medios han contado que el músico estaba paseando con su moto por la Gateway National Recreational Area, un parque federal cercano a Ashbury Park y su rancho de Colt Necks en Nueva Jersey, cuando se paró a tomarse unas fotos con un grupo de fans. “Bruce se paró, se hizo las fotos y un fan le ofreció un trago de tequila, que aceptó mientras estaba parado en la moto”, le ha contado uno de sus allegados al ‘New York Post’. 

Fue entonces cuando habría sido detenido y sometido a un control de alcoholemia, en el que dio por debajo del límite establecido, de acuerdo con el informe obtenido por 'The Ashbury Park Press'. Por el momento, ni el cantante ni sus representantes han hecho declaraciones al respecto.