SARAY VARGAS EN 'VIS A VIS'

Alba Flores: "No sé si soy icono feminista"

La actriz presenta la cuarta temporada del drama carcelario 'Vis a vis'

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Luis Miguel Marco

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La actriz Alba Flores (Madrid, 1986) regresa este lunes 3 de diciembre junto a sus compañeras al drama carcelario de Vis a vis (Fox, 22.00 horas) en su cuarta temporada. Saray Vargas de Jesús vuelve  a ingresar en Cruz del Norte. Bienvenida la marea amarilla. 

–Decía que esta serie ha sido como su universidad de tele. ¿Esta cuarta temporada es el máster?   

–Totalmente. ¿Sabe además que hay veces en que los máster se desmarcan un poco de la carrera? Pues en esta temporada me ha pasado un poco esto porque Vis a Vis es básicamente acción, thriller, dar leches a diestro y siniestro. Pues esta cuarta temporada es más emocional. Vaya que parece más bien una tragedia lorquiana. Yo he llorado más que nunca. Aunque tengo que decir que no acaba tan mal como parece.

–Ojo que luego le recriminan porque hace demasiados spoilers

–Es verdad. Bueno, que es una temporada muy cruda, donde pasan cosas muy fuertes y que el final es muy bonito y tiene algo muy tierno.  

–Rodaron la tercera y la cuarta casi del tirón. ¿Qué me dice de las nuevas incorporaciones? 

–A la familia de Vis a vis siempre nos gusta agregar a nuevos miembros. Van a dar mucho que hablar.

–Habrá también una aparición de de la cantante Mala Rodríguez. 

–Sí. Nos ha hecho un cameo. Para mí es todo un privilegio que haya hecho también una canción para nosotros. A ver cómo lo explico. La primera vez que quise ponerme a currar el personaje de Saray lo primero que hice fue ponerme un disco de La Mala para inspirarme, así que ya puedes imaginar lo importante que es para mí que aparezca. Ella es muy fan de la serie, desde el principio.

–Usted venía de aparecer en unos capítulos de El tiempo entre costuras

–Por eso bromeo y digo que soy un talismán para las productoras.  

–¿Es cierto que muchas chicas lesbianas le han escrito contándole que el personaje que interpreta les ha ayudado a salir del armario? 

–Eso es lo que me cuentan y espero que así haya sido. Yo me alegro mucho de que sea así. Nunca pensé en que esto pudiera pasar gracias a la fuerza de la televisión. Y jolín, parece que si se hacen las tramas adecuadas uno puede llegar bien hondo a la gente y echarles una mano, aunque sea para respaldarles en decisiones importantes en sus vidas. 

–¿Cree que esta serie llegó –primero a Antena 3, después a Fox– en un momento en que era necesario mayor protagonismo femenino?

–Bueno. ¿Qué fue antes el huevo o la gallina? Yo creo que estaban pasando cosas muy fuertes en el mundo. Y claro, si juntas un elenco femenino para una ficción en esos momentos pues lo lógico es que haya pasado lo que ha pasado con Vis a vis, que volvió por aclamación popular.   

–¿Pasar de una cadena generalista a Fox significó que pudieron abordar temáticas más complejas?

–Para mí la diferencia vital es el metraje de los capítulos, que pasaron a durar 50 minutos, como en las series que se hacen fuera. Eso es vital en una serie tan trepidante. Ha ayudado a quitar mucha paja y mucha secuencia que realmente no era tan necesaria. Lo ha condensado y ahora es todo mucho más potente.

–En la tercera temporada le cortaba el pene a su violador, Sandoval. Eso no se había visto en televisión.

Fue un momento catártico, ¿no?  Así lo viví yo y seguro que muchas mujeres también. A ver, no creo que esa sea la mejor solución para un tema tan duro como que los hombres sigan violando y matando mujeres, pero creo que es una fantasía lícita para una ficción. Y como dice, fue algo que nunca se había visto en España en televión. Encarnar esa escena para la posteridades algo de lo que estoy muy contenta de haber hecho. 

–Las cifras que arroja la violencia machista son aberrantes. 

Y está muy bien que los medios habléis de violencia machista y no de género o doméstica. Una enfermedad que hace mucho que está entre nosotros y que debemos atajar. 

–¿Se siente a gusto cuando se la define como un icono del feminismo?

No sé si soy un icono feminista o no. Pero creo que soy una participante de este movimiento y no de ahora, ya desde mis células. Yo no hago con esto propaganda de mí misma para quedar bien con la prensa o para ganar punto como actriz.Es que como mujer no quiero mirar para otro lado. Estamos repensando nuestras reivindicaciones. Pero lo de icono no porque este movimiento tiene que ver también con trascender esas cosas. Y no pertenece a nadie y nos pertenece a todas las que participamos de él, incluso a las que se mantienen al margen.

–Deje que de la marea amarilla de Vis a vis pasemos a la marea roja de La casa de papel

–En Argentina incluso me han contado que hay familias que han puesto a su hija Nairobi. Eso es muy fuerte. Es para flipar. Me cuesta procesar todo eso porque ha sido muy rápido y no nos podíamos creer el éxito que ha tenido la serie en un montón de países. Tampoco es que estuviera haciendo muy buenas audiencias en Antena 3, pero está claro que es muy loco este mundo en el que vivimos.

–Lleva la fama como denominación de origen. Usted es famosa ya desde antes de nacer gracias a la canción que le hizo su padre, Antonio.

–Esto de la fama es algo que mucha gente desea pero que yo no se lo desearía a nadie.

–¿Emocionada por ser la madrina de Noah, el hijo de su prima Elena Furiase y de Gonzalo Sierra?

–Me han elegido y estoy feliz descubriendo también un mundo nuevo. Es el primer niño de la siguiente generación. Aún no habíamos vivido esto de  adultas. Es una maravilla.

–¿Hará más  teatro?  

 –Eso siempre está ahí y forma parte de mi día a día aunque el gran público no lo sepa. El año pasado participé en el montaje de Troyanas que estrenamos en el Festival de Teatro Clásico de Mérida. Y estoy trabajando con unas compañeras en levantar una compañía propia y parece que pronto vamos a poder estrenar en Madrid.

–El cine es lo único que se le resiste.

–Es la espinita que tengo ahí pendiente. Parece que no encuentro manera. O no se encuentran conmigo. Pero ya habrá oportunidad.