Kanye West y Kim Kardashian visitan al presidente más homófobo de África

Tras deshacerse la semana pasada en elogios hacia su amigo Donald Trump en un encuentro con el magnate en la Casa Blanca, el rapero Kanye West ha extendido este lunes su lista de amistades políticas con un viaje inédito a Uganda. Acompañado de su mujer, la estrella de 'reality show' Kim Kardashian, el controvertido rapero ha sido recibido en la capital ugandesa por el presidente del país, Yoweri Museveni.

En el poder desde 1986, Museveni es uno de los líderes más veteranos del continente, y quizá el más homófobo en una parte de la Tierra que no es precisamente conocida por su tolerancia con las minorías sexuales. En un mensaje publicado en Twitter, Museveni ha agradecido la visita a Kampala del mediático matrimonio, con el que este exguerrillero acusado de dictador ha hablado “de cómo promover el turismo y las artes de Uganda” en el mundo.

Unas zapatillas de regalo

West y Kardashian le regalaron unas flamantes zapatillas deportivas blancas a Museveni, quien ahora tiene 74 años y en el 2014 aprobó una ley -finalmente anulada por la Justicia- que penaba con cadena perpetua los actos homosexuales. En una de las imágenes publicadas por el jefe del Estado se ve al anciano presidente posando orgulloso con las zapatillas mientras le da la mano a West.

Otra de las fotos muestra a Kardashian -famosa entre otras cosas por un imponente trasero valorado en más de 20 millones de dólares- entregándole un libro en la misma sala cubierta de moqueta roja del palacio presidencial. Las instantáneas recogen asimismo el momento en que Kardashian y West -en chándal y con la cabeza cubierta con una capucha- salen a las escalinatas del palacio guiados por Museveni.

Homosexuales "asquerosos"

El músico y compositor afroamericano, que a sus 41 años tiene más de 20 premios Grammy y ha trabajado como productor con artistas como Jay-Z o Alicia Keys, ha sido duramente criticado por el entusiasmo que ha expresado en repetidas ocasiones hacia un político tachado de racista como es Donald Trump. Dejarse agasajar por un líder africano que ha calificado a los homosexuales de “asquerosos” y los persigue con puño de hierro en su país no hará más que redoblar las críticas contra West, que parece disfrutar con los escándalos y no duda en exhibir actitudes impopulares entre su gremio.

Además de su amistad con West, a Museveni y Trump les une su cercanía con grupos ultraconservadores evangélicos. Misioneros de algunas de estas organizaciones que apoyaron a Trump en su camino a la Casa Blanca han tenido un papel crucial en la promoción de la homofobia en Uganda.