Ortega Cano, en los juzgados contra la revista 'Mongolia'

José Ortega Cano ha acudido este miércoles a los juzgados para enfrentarse a un juicio contra la revista satírica 'Mongolia' por supuestamente vulnerar su derecho al honor y a la propia imagen por la publicación de un cartel satírico del Musical 2.0, unos delitos por los que el diestro exige al semanario 40.000 euros.

Defendiendo la sátira y con la intención de pagar los costes del juicio, desde 'Mongolia' han iniciado una campaña de 'crowfunding' con la que ya han conseguido recaudar más de 12.000  euros.

El torero a su llegada a los juzgados de Alcobendas ha reconocido que había emprendido estas acciones legales porque "me siento muy mal. Me siento ridiculizado", y es que al matador le ha ofendido gravemente que se dejara ver a través de la sátira sus problemas de alcohol. "Las cosas son como son y ya está bien de que todo el mundo pueda hacer lo que quiera y utilizar tu nombre y utilizarte como un bufón. Entonces, ese es el motivo de ello, de este juicio", ha reconocido exaltado.

La demanda interpuesta por Ortega Cano hace referencia a un cartel realizado por los promotores del espectáculo 'Mongolia, el Musical 2.0’ que anunciaba su paso por Cartagena, ciudad natal del torero, en el que era el protagonista de una broma y se rescataba su famosa frase: "Estamos tan a gustito" y aparece disfrazado de extraterrestre.

"Vejación, burla y escanio"

Según han explicado desde la revista, la demanda de Ortega Cano, presentada por el letrado Enrique Trebolle, afirmaba que el cartel satírico de 'Mongolia' se movía "en el terreno de la mofa y el escarnio, absolutamente injustificados y gratuitos", y pretendía "obtener rédito económico de la vejación, burla y escarnio" de la imagen del torero. El requerimiento reprobaba tanto el fotomontaje como las expresiones que lo acompañan: "Antes riojano que murciano" y "Viernes de dolores… sábados de resaca".

Aunque en el escrito de respuesta de la editorial se detalla que se hizo con el único objetivo de "informar a los futuros espectadores del contenido del espectáculo, sin pretender en ningún momento difamar a ninguna de las personas, símbolos o imágenes que aparecen en los mismos".