Samantha Vallejo-Nágera: "No veo televisión"

Samantha Vallejo-Nágera, la misma que siempre reclama "¡saborrrr!" a los platos como jurado del programa 'MasterChef', presenta nuevo libro esta semana. Se titula 'Fórmula Samantha', lo publica editorial Conecta, y son, dice, sus secretos para llegar a todo y exprimir la vida al máximo. "Ni en la vida ni en el trabajo me permito la monotonía", proclama esta optimista nata.

"De entrada reconozco que aunque siempre me he considerado una peonza en movimiento, no soy una 'superwoman'. Al hacerte mayor, te vuelves mucho más selectiva. Lo que hay que hacer es saber organizarse. A mí me ataca la falta de orden. Y hay que saber también delegar en los demás. Eso es superimportante, porque por mucho que uno se esfuerce, es imposible llegar a todo".

Hablamos con Samantha en conversación telefónica en dos momentos. El primero, desde el plató donde se graba 'Masterchef' en Madrid. De fondo se cuela el sonido un montón de niños y la voz grave de Jordi Cruz, el otro miembro del jurado (el trío lo completa Pepe Rodríguez).

"Estamos grabando una nueva edición del MasterChef junior, la que se verá en televisión desde diciembre a Reyes. Y hemos parado un momento. Me están maquillando", aclara una Samantha a la que le encantan los colores energéticos. "Son también una forma de presentarse al mundo y a mí me gusta ir extremada".

UNA VEZ EN LA VIDA

"Esto de la tele ha sido un regalazo que te pasa una vez en la vida y no se vuelve a repetir. Es cierto que grabar tres días a la semana, con horarios largos, cuesta. Pero es muy agradecido ver, y me refiero a los adultos, cómo cocineros vocacionales se han convertido en auténticos profesionales. Y luego está la respuesta de la gente, que es maravillosa". ¿Y usted ve tele?: "Excepto MasterChef, no veo nada de televisión. Además es que cuando comemos o cenamos, en casa la tele está apagada.

En el libro, la hermana de Colate podría haber contado cómo se cuece el programa, pero no. Podría haber refrito un libro de recetas, pero tampoco, aunque da la receta de su gazpacho, "sin pan duro, no lo considero necesario". Lo que hace esta empresaria y madre de cuatro hijos todavía pequeños, es contar cómo fueron sus inicios profesionales y cómo se lo monta para tener varios frentes abiertos y desconectar los fines de semana en la casa familiar en Pedraza.

"No me escondo. Reconozco que soy una privilegiada. Mi marido y yo trabajamos y en casa tenemos servicio que nos ayuda. Con el catering, igual. Empecé yo sola hace 25 años pero hoy somos una empresa con tres naves industriales en Alcobendas con 40 personas, y ahí también tienes que formar un equipo".

BOQUERONES EN VINAGRE

"La suerte siempre me ha encontrado trabajando", asegura esta mujer a la que desde niña le gustan los boquerones con vinagre, que celebró la comunión en un chino y a la que la retaron a trabajar en el restaurante Horcher un día y se quedó dos años. Una mujer que se fue sola al extranjero y se curtió en Londres y en Nueva York.

"Hacía gazpacho y paellas a domicilio. Me iba a Chinatown en patines y compraba allí los ingredientes. Me encargaba de todo, hasta de la decoración. Era muy folclórica". Para entonces ya se había impreso una tarjeta de presentación que era toda una declaración de intenciones: Samantha de España, a la postre el nombre de su empresa.

La segunda parte de esta conversación transcurre en Valencia, tras otra jornada de grabación de 'MasterChef' en exteriores. Ahora está en el hotel y cuando acaba de hablar cogerá los patines y se irá a correr con ellos. "Siempre me ha gustado hacer deportes aeróbicos. Hasta boxeo. Cuando cumplí los 40 me fui a hacer el maratón de Nueva York. Fue duro, pero se lo recomiendo a todo el mundo. Comprar buenos productos y hacer de la mesa una fiesta es importante. A mí me encanta comer de todo y también me doy mi atracones, pero quemar grasa y cuidar el cuerpo, sentirte en forma y saludable, me parece fundamental. Por eso he escrito también este libro".

SU HIJO ROSCÓN

Hay también otra razón: su hijo Patrick, al que todo el mundo conoce como Roscón "porque llegó con sorpresa el día de Reyes", un niño que ahora tiene 8 años y es "un poco Gila" -Samantha es madre también de Chloe, Pedro y Diego-. 

"Lucho por la visibilidad de las personas como Roscón, con síndrome de Down. Por eso lo llevé al programa. Forman parte de la sociedad y por desgracia muchas veces parece que están fuera de ella. Y son tan espontáneos, tienen tanta luz... Lo que hago muchas veces es hablar con padres que acaban de tener un bebé con trisomía del par 21, para apoyarles y aconsejarles. En ese momento, y a mí me pasó, se te cae el mundo encima. Así que una de mis luchas en esta vida es intentar que ese desconocimiento acabe y desvelar el lado positivo y optimista de tener un hijo con síndrome de Down".