La madre de Carla Bruni cuenta los secretos de la familia

Carla Bruni supo que Maurizio Remmert era su padre biológico en 1996, cuando la modelo, cantante y exprimera dama francesa tenía 28 años. Fue Alberto, el marido de su madre, quien quiso desvelar el secreto de familia antes de morir y Marisa Bruni Tedeschi, la encargada de darle la noticia que a la joven Carla le hubiera gustado conocer antes.

"El hecho de que la hubiera tenido con otro hombre no le sorprendió nada. Sin embargo, me reprochó que le hubiera ocultado la verdad durante tanto tiempo. Y tenía razón", admite Marisa Bruni Tedeschi en 'Mis queridas hijas, os voy a contar…', la autobiografía que este martes aparece en las librerías francesas publicada por Robert Laffont.

A lo largo de sus 300 páginas, la madre de Carla Bruni habla de su vida familiar, sus amores de juventud, los grandes festivales de música clásica que recorrió como pianista e incluso de los entresijos del Elíseo. También de sus hijos: Virginio, muerto a causa del sida en el 2006, Valeria, actriz y directora, y Carla.

"Quería contar mi vida a mis hijas hasta en los más mínimos detalles, porque todavía hay muchas cosas que no saben de mí. Naturalmente, hay algunos pasajes que pueden sorprender, pero me da igual. A los 86 años puedo decir lo que quiera", ha declarado a la revista 'Gala'.

Casada en 1958 con el compositor Alberto Bruni Tedeschi, esta apasionada de la ópera reconoce haber sido una gran enamoradiza. Además del pianista Arturo Benedetti Michelangeli, entre sus amantes figura Georgio Remmert y su hijo Maurizio, del que se enamoró cuando él tenía 19 años y ella 35. De esa relación nació Carla Bruni. "En esa época, en la familias burguesas se guardaban muy bien los secretos. Mis tres hijos no sabían nada", señala.

"Cuento esta historia en un capítulo para explicarle a mi hija por qué nunca le hablé de ello. En el fondo siempre hubo un poco de resentimiento, pero un día le dije: No te quejes, tienes dos padres y los dos son buenos", ha comentado Marisa Bruni Tedeschi en la emisora Europe 1.

RELACIÓN CLANDESTINA

La relación clandestina entre la madre de Carla Bruni y Maurizio Remmert era bien conocida en los círculos de la burguesía de Turín de los años 60, pero nunca se habló de ella hasta que el propio Remmert decidió sacarla a la luz en enero del 2008 en el diario 'O Estado de Sao Paulo' para poner fin a los rumores que corrían en el papel cuché brasileño.

"Viví con Marisa una gran historia de amor. No fue una aventura", decía Remmert en la entrevista el empresario italiano instalado desde hace más de 30 años en Sao Paulo, donde dirige un negocio dedicado al vino y la gastronomía.

El padre biológico de Carla Bruni asistió en París al matrimonio de la cantante con el entonces presidente francés, Nicolas Sarkozy, en febrero del 2008 y fue invitado a la Lanterne, la residencia próxima a Versalles donde la pareja pasó su luna de miel.

ENCUENTRO CON SARKOZY

En la revista 'Gala', Marisa Bruni-Tedeschi relata otro encuentro memorable, el que tuvo con Sarkozy antes de que se convirtiera en su yerno. "Un sábado Carla pasó por casa para dejarme a su hijo Aurélien porque tenía que salir. Llamaron a la puerta y era Nicolas, que quería conocerme. Se sentó en el sofá. Yo estaba con mi hermana Gigi. Creo que quería saber dónde se metía!".

La madre de la exprimera dama se enorgullece de entenderse "muy bien" con el antiguo jefe del Estado, del que dice que es "muy atento" con ella, como lo es con su propia madre. El único tema tabú que existe es la política, un tema que se evita escrupulosamente cuando están juntos.