La pasarela barcelonesa de la moda

Adriana Lima: «Soy superpositiva»

La modelo brasileña es la estrella de Desigual

Adriana Lima: «Soy superpositiva»_MEDIA_1

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MARTA CERVERA
BARCELONA

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A sus 33 años y con una considerable experiencia a sus espaldas la modelo brasileña Adriana Lima transmite una alegría desbordante. Afirma que ver el lado bueno de las cosas le ayuda a mantenerse optimista ante la vida, algo importante ahora que su matrimonio con el jugador de baloncesto Marko Jaric se ha ido al traste. La top de espectaculares ojos azul claro que observa la vida desde sus 178 centímetros de altura se mostró ayer 100% positiva y feliz en Barcelona en su presentación como estrella de la firma de moda  Desigual. Lima será la protagonista de la próxima campaña otoño-invierno de la marca, tras haber participado ya en la anterior de primavera-verano. «Soy superpositiva y necesito rodearme de gente con el mismo tipo de energía. Desigual la tiene. Es una marca que transmite optimismo y autenticidad, dos cosas que valoro», aseguró la modelo.

Lima, considerada una de las mujeres más sexis del planeta y de las mejor pagadas según la revista Forbes (en el 2012 ocupó el número 3 del ranking), vuelve a estar soltera. A principios de mayo anunció su separación del jugador serbio Marko Jaric. «De lo malo también se aprende. Hay que ver siempre el lado bueno de las cosas. Para eso a veces basta concentrarse en la belleza del mar, disfrutar de los hijos o de una vida sana», afirmó ayer la modelo sin querer entrar más en el tema. La pareja se conoció en el 2007 y se casó ocho meses después, en el 2008. Lima, ferviente católica, se mantuvo virgen hasta el matrimonio para no traicionar sus creencias. La pareja ha tenido dos hijas, Valentina, de cuatro años, y Sienna, que en septiembre cumplirá dos. ¿Serán ellas modelo como mamá? «Si quieren serlo las apoyaré. Lo importante es que elijan aquello que las haga felices», asegura. Pero si siguen sus pasos en la pasarela, añade, «les buscaré el mejor agente».

BELLEZA INTERIOR/ Tal vez para aplacar la envidia de las que no han heredado sus portentosos genes, Adriana Lima repitió en varias ocasiones que la belleza viene del interior. Y al hablar de sus defectos de personalidad destacó como principal problema su obsesión por la perfección. «Soy perfeccionista en todo, tanto en la vida como en mi profesión. Por suerte, la maternidad me ha cambiado un poco en este aspecto. Ahora soy más flexible, me adapto con más facilidad a los cambios». Y añadió: «Ser madre te hace valorar las cosas importantes de la vida y mis hijas me han aportado mayor confianza en mí misma». Mientras ella está en Barcelona sus niñas permanecen en su casa de Miami, cuidadas por la madre de la modelo. «Mi familia ha sido siempre un enorme apoyo», reconoce feliz y con ganas de poder viajar pronto a su añorado Brasil para disfrutar del final del Mundial. «Todo el mundo cree que Neymar es la gran esperanza del fútbol brasileño y seguro que está bajo una gran presión. Pero el fútbol es un trabajo de equipo. No puede hacerlo todo un solo hombre. Eso sí, le agradezco el penalti que marcó en el último partido».