Ana Botella niega en 'Vogue' que sea una legionaria de Cristo

LAURA ESTIRADO / BARCELONA

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Si esta misma semana su marido amenizó, por más de una hora, las mañanas de Ana Rosa Quintana, ella, la mujer de José María Aznar, Ana Botella, concejala de Empleo y Servicios a la Ciudadanía del Ayuntamiento de Madrid, garantiza al menos 10 minutos de lectura ligera con el reportaje de cuatro páginas que le dedica el último número de Vogue.

Los que esperen una réplica a las palabras del martes del expresidente sobre que su señora puede optar a la presidencia del Gobierno se llevarán un chasco. En la entrevista con la prestigiosa revista de moda, Botella solo arregla algún que otro entuerto sobre su persona. "No he pertenecido al Opus Dei ni a los Legionarios de Cristo; no lo habría ocultado porque son órdenes respetables", asegura la diva del PP, que aspira a "estar en el equipo" de Alberto Ruiz-Gallardón en las municipales.

Y es que la política municipal es lo que más le sulibeya en estos momentos a la señora Aznar. "Te da la facultad de poder ayudar a personas con nombre, con apellido, con problemas concretos... Te tiene que gustar la gente, y a mí, me encanta", confiesa Botella, que entre las políticas sociales del Ayuntamiento de Madrid destaca "la teleasistencia y también la ayuda a domicilio".

CAMBIO DE

ROLES

Desde que ya no es primera dama, muchas cosas han cambiado en su vida. "¿Quién me iba a decir a mí --se pregunta la concejal en un claro guiño musical--, hace a lo mejor seis años, que mi marido se iba a quedar en la cama y yo iba a salir corriendo?". Ahora no pueden, explica, ni hacer deporte juntos: "Jose tiene un horario más cómodo que el mío, excepto cuando está fuera, porque él ahora viaja sin parar, porque se gana así la vida y hay que comer".

Sin embargo, esto es lo único que le puede reprochar Botella al hoy profesor de Georgetown con el que lleva 28 años casada. El resto son cumplidos: "Con cosas buenas y con malas, España era mejor después de los ocho años que José María Aznar fue presidente del Gobierno que antes de ellos".

Pero el capítulo de "me encantan" de la concejala de Madrid prosigue más allá de su marido, que últimamente luce melena ("se la he aconsejado porque me gusta). Entre las aficiones de la señora Aznar también tienen cabida la moda ("es cultura, está unida a nuestra historia, es una industria que crea un montón de puestos de trabajo, es riqueza para un país"); las Navidades ("me encantan"), y la música ("desde la clásica, con María Callas, a Maná, desde los Beatles a los boleros").