Alta gama

Un brindis histórico para las fiestas con Gran Claustro de Perelada

La centenaria bodega del Empordà propone para la Navidad su tinto Reserva Especial y un cava Gran Reserva que representan la pasión, la tradición y la innovación de la firma catalana

El cava Gran Claustro Brut Nature Gran Reserva, de Perelada.

El cava Gran Claustro Brut Nature Gran Reserva, de Perelada.

Alberto Zamora

Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Dentro de pocas semanas llegará el momento de reunirnos con los seres queridos para celebrar las fiestas navideñas. Conviene ser previsor e ir preparando las propuestas enológicas, con las que brindaremos en unas fechas tan señaladas. La bodega Perelada propone como protagonista de los festejos a uno de sus iconos más emblemáticos de alta gama: el vino tinto Gran Claustro.

Podemos decir que la variedad Gran Claustro representa la pura esencia del Empordà. Estamos hablando de un vino elaborado a partir de la mejor selección de uvas, pertenecientes a cada una de las fincas de Perelada. Es un vino que representa un reflejo de las mejores sensaciones de la tierra, como pueden ser sus paisajes, el aroma de sus campos y la tramuntana.

El Gran Claustro Reserva Especial (41,55 euros) cuenta con una producción limitada de tan solo 5.491 botellas. Se elabora, exclusivamente, en las mejores añadas, a partir de uvas seleccionadas y recogidas siempre de forma manual.

La edición de 2024 viene acompañada de un nuevo diseño, que presenta un estilo más contemporáneo, pero que conserva guiños a la historia de Perelada en su etiqueta. Además, incorpora elementos que recuerdan las texturas de los materiales que definen el interior de la bodega del Empordà. 

Un trayecto por los siglos

En Perelada, el vino y su elaboración se remontan al siglo XIV, momento en el que los monjes carmelitas, que vivían en el Convento del Carmen, llevaron a cabo la construcción de una bodega debajo del claustro del monasterio. Allí elaboraban vinos para abastecer a toda la región. De esa historia surge el nombre de Gran Claustro, el primer vino de alta gama de Perelada.

Se trata de un vino con variedades cabernet, samsó, garnacha negra, merlot y cabernet franc, elaborado en tinto, con maceración larga y fermentación controlada a 22 °C. Su sabor presenta aromas de frutos rojos, que casan a la perfección con las notas de crianza y un fondo especiado. Es un vino muy elegante, equilibrado, largo, con personalidad y una muy buena capacidad de envejecimiento.

Un cava testigo de las grandes citas

El siguiente protagonista es la modalidad Gran Claustro Brut Nature Gran Reserva (17,50 euros). Se trata de un cava de referencia internacional, que encuentra su origen en 1959, cuando Perelada recibió el encargo de seleccionar un cava con motivo de la visita a España del presidente de los Estados Unidos Dwight D. Eisenhower.

La iniciativa tuvo un éxito rotundo, dando nacimiento al cava Gran Claustro, que este año ha actualizado su botella, incorporando elegantes detalles dorados, con referencias a la historia de la bodega, incluyendo aspectos que evocan el Castillo Perelada y su claustro.

El cava es elaborado siguiendo el método tradicional, partiendo de una selección de las mejores uvas, chardonnay y pinot noir, procedentes de los diferentes viñedos que tiene Perelada en Vilafranca del Penedès, concretamente en las Valls d’Anoia-Foix. Es una bebida fabricada a partir de vinos seleccionados de la cosecha de 2019, amparada por la Denominación de Origen Cava. Además, solamente es elaborada en las vendimias que son catalogadas como excepcionales.

Tiene un color amarillo paja pálido, con ligeras tonalidades. Es límpido y brillante, presentando un desprendimiento constante de pequeñas burbujas con formación de corona. Cuenta con un aroma limpio a fruta madura, con tonos de crianza y notas de tostado, con un sabor ligeramente afrutado y untuoso, con matices de roble, seco y suave.

Perelada, una bodega referente

Perelada es toda una representación de la DO Empordà, que se encuentra marcada por su ubicación entre el Pirineo y el Mediterráneo. Los orígenes de la bodega se remontan a 1923, momento en el que la familia Mateu empezó a elaborar vinos en un paraje único, revitalizando la tradición vitivinícola de la comarca del Empordà.

En el año 2022 inauguraron la primera bodega en Europa en obtener la máxima calificación mundial en edificación sostenible: la certificación LEED® Gold. Este hito refuerza su compromiso con el medio ambiente y el equilibrio que mantienen entre tradición e innovación. Peralada ha ido consolidando su reputación gracias a vinos que presentan una identidad propia, como el citado Gran Claustro, o los icónicos vinos de finca: Finca Malaveïna o el famoso Finca Garbet, reconocido entre los diez mejores vinos de Catalunya. 

En el pasado año, Perelada celebró sus 100 primeros años de historia, manteniéndose fiel a sus dos grandes premisas: ser referentes en sostenibilidad y elaborar vinos excepcionales.