Ganaste, Xavi, pero rozaste la hecatombe (de nuevo)

Andá pallá Bobo by Emilio Pérez de Rozas

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“Aquí, los vales de tranquilidad solo duran dos o tres días. Y solo es cierta tranquilidad. Siempre habrá gente que criticará. Lo sé. Conozco muy bien lo que es el Barça. Si mañana perdemos en Girona, otra vez será una hecatombe tremenda”.

Pues no, Xavi, no, ganaste en Girona y esa nueva victoria pírrica (tercera en una misma semana: Getafe, Real Sociedad y Girona), muy parecida, sí, a las que logra el ‘Cholo’ Simeone con su Atlético y hasta casi, casi, como las que suma ese Real Madrid que detestas por la manera tan suertuda que gana o remonta los partidos, te ha salvado, a ti y los tuyos, a todos, de esa hecatombe (siempre momentánea, el presidente confía ciegamente en vosotros) que, posiblemente, se producirá cuando el Sorloth de turno, que erró el empate el día de la Real Sociedad, o el Iván Martín de hoy en el Municipal de Montilivi, acierten en su remate.

El problema, Xavi, es que la exhibición de la Supercopa ante el Real Madrid empieza a ser flor de un día y que no tiene continuidad.

Números de récord

Bueno, continuidad sí tiene en los resultados ¡espectaculares! y en la puntuación de Liga, camino de los 100 puntos y líderes indiscutibles. Y, casi, casi, campeón de invierno. Y, claro, si la comparación es, como has explicado, en referencia al año pasado (300 millones de euros después y 15 meses tuyos en el banquillo), pues sí, el cambio es evidente.

Pero no fue eso lo que prometisteis al llegar. Y por eso son muchos los barcelonistas, no todos, no, los hay (a miles) que dan saltos de alegría con lo que ven y cómo se sienten, que creen que este equipo no es redondo, que no mejora con el paso de las semanas, que ha jugado un solo partido estupendo en meses (¡grande!, sí, ¡inmenso!) y que empieza a ganar, a salvarse, a sumar, a esquivar la hecatombe tremenda, gracias a ese golito, a ese Araujo impresionante, al milagroso Ter Stegen o a que Sorloth, Iván Martín o el rival de turno falla las ocasiones del último suspiro.

Xavi protesta en la banda a los asistentes

Xavi protesta en la banda a los asistentes / Pau BARRENA / AFP

El equipo no domina, el equipo no controla, el equipo no remata, el equipo no se impone, el equipo no progresa y el equipo ni siquiera vive tranquilo, en paz, enfrentándose, por ejemplo, a un Getafe que roza el descenso, a una Real Sociedad con 10, sin Merino, sin Silva o ante un Girona asustado.

Es evidente que si el consuelo, la frase, la explicación, la petición de prórroga, reclamar paciencia, viene dado por el comentario pronunciado por ti, en el Municipal de Montilivi, “estamos haciendo las cosas mucho mejor que de dónde veníamos”, entonces no hay nada que decir, ni que criticar, ni hecatombe que temer.

Pero no fue eso lo que prometisteis desde el inicio, desde la creación del Barça 2.0, desde la fabricación de las palancas, desde el nacimiento de la ‘nueva era’. Los resultados, excelentes, impensables tal y como está jugando el equipo, van por un lado y las sensaciones, por otra.

"Estamos haciendo las cosas mucho mejor que de donde veníamos"

— Xavi Hernández, entrenador del FCBarcelona

Las sensaciones, que son la fuente de la ciencia culé según los gurús azulgranas, no son buenas y hasta tú te ves en la necesidad ¡y haces bien, que caray!, de defender que “también en el ADN del Barça está tirar algún que otro centro” a la olla, de vez en cuanto.

Eso, por descontado, y hasta defender los 11 debajo del larguero durante los últimos cinco minutos. Y hasta celebrar la victoria cuando Sorloth y/o Iván Martín fallan el gol que hubiese provocado la hecatombe tremenda.

Yo firmó ganar así; pero vosotros, no. Y resulta que a mí no me gusta lo que veo y a vosotros, os encanta.

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