LAS REACCIONES

Alba agradece la confianza de Luis Enrique con el gol

"Estamos convencidos de pasar a la final a cuatro, dependemos de nosotros que es lo que queríamos», dice Borja Iglesias, debutante junto a Nico Williams

Jordi Alba y Marcos Asensio celebran el gol de España, anotado por el azulgrana tras una jugada individual del madridista en Zaragoza

Jordi Alba y Marcos Asensio celebran el gol de España, anotado por el azulgrana tras una jugada individual del madridista en Zaragoza / JAVIER SORIANO / AFP

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Tan contentos como los debutantes Nico Williams (su hermano Iñaki también debutó con Ghana, el país de su madre) y Borja Iglesias debía sentirse Jordi Alba. El gol que anotó era especial. No por la trascendencia deportiva (era el noveno con la selección y sirvió sólo para el momentáneo empate), sino por la trascendencia personal.

Su puesto en la selección está (o estaba) en entredicho por el largo tiempo que Luis Enrique prescindió de él. Ahora, suplente en el Barça, sigue igual de incierto. El que más de los seis azulgranas que coincidieron, los seis, en la alineación. Con Xavi Hernández, su entrenador, rezando de rodillas ante el televisor por que no se lesionara nadie más tras los cuatro caídos del jueves. La convocatoria era un espaldarazo del seleccionador. El gol tuvo el valor de la reivindicación futbolística.

"Estoy agradecido que Luis Enrique siga confiando en mí y solo me queda corresponderle en el campo", dijo Alba, que creyó haber aprovechado la oportunidad para lucirse en el partido. No la aprovechó España que se condenó a ganar obligatoriamente a Portugal para ganar el grupo.

Igual que Alba, Iglesias aceptó que España anduvo espesa y a remolque de Suiza en muchos periodos. "Estamos convencidos de pasar a la final a cuatro. Dependemos de nosotros que es lo que queríamos", dijo.

ZARAGOZA, 24/09/2022.- Luis Enrique, seleccionador de fútbol de España, se lamenta durante el partido de la Liga de Naciones que España y Suiza disputan este sábado en el estadio de La Romareda, en Zaragoza. EFE/Toni Galán

Luis Enrique se lamenta durante el partido. / Toni Galán / Efe

La final será en Portugal

"Extraño será el día en que uno acabe el partido", dice Luis Enrique, que cambió de golpe a los tres delanteros.

Nico Williams era el otro feliz debutante. "El míster me dijo que fuera yo mismo, que encarara y que abriera el campo como si jugara en el Athletic", explicó el extremo, contagiado del optimismo que tenía, pese a todo, el equipo. Luis Enrique ya les había avisado, antes de conocerse el desenlace del partido, que "la final será en Portugal".

Y allá irá España, con el propósito de mejorar su juego. Mucho tendrá que hacerlo. "No es que hayamos sido imprecisos, sino lo siguiente, lo contrario de toda la semana", lamentaba Luis Enrique, algo molesto tras haber escuchado que Suiza era un rival fácil. Su inquietud por el potencial de un adversario fue físicamente estaba justificada. También tenía su poderío en el balón parado y España encajó dos goles en sendos córners.

"Me gusta la fe que tiene el equipo, es el mensaje que quiero lanzar", subrayó Luis Enrique, que elogió el buen hacer de los debutantes. El técnico cambió de golpe a los tres delanteros. "Extraño será el día en que uno acabe el partido. En este equipo tienen mucha exigencia por todo lo que hay que trabajar", sostuvo.