FÚTBOL

Reinildo Mandava, el refuerzo del Atlético que cobraba 30 euros en Mozambique y se refugió de un tiroteo en una comisaría

El nuevo jugador del equipo rojiblanco perdió a su madre antes de fichar por el Benfica y abandonar su país, donde cobraba una nómina muy pequeña pese a ser profesional

Reinildo Mandava, en el centro, con la camiseta del Ferroviário, con el que firmó su primer contrato profesional.

Reinildo Mandava, en el centro, con la camiseta del Ferroviário, con el que firmó su primer contrato profesional.

Denís Iglesias

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“¡Soy un gran jugador, tienes que venir a verme!”, imploraba a su padre un benjamín Reinildo Mandava, el nuevo lateral del Atlético que podría debutar este domingo en el

Camp Nou.

“Mira, aún no eres lo suficientemente bueno. Ya habrá tiempo”, le respondió. 

En un momento del encuentro, el joven mozambiqueño miró hacia el árbol que estaba pegado al terreno de juego. Detrás, escondido, presenciaba el encuentro su progenitor, que también fue futbolista. Como su abuelo, su hermana… Pensó que no le había visto. Pero vaya si supo de su presencia. 

Empezó a correr y a meter goles. De vuelta a casa, le confesó: “Hijo mío, si continúas así, vas a ser un gran jugador”. Al poco, el Reinildo de 11 años perdió a su padre. Con 21, antes de emigrar al fútbol europeo, despidió a su madre. 

“Estas dos pérdidas han marcado su carácter a lo largo de los años. Aunque en el aspecto positivo. La mayoría de sus conquistas han servido para honrar su memoria”, señala a

EL PERIÓDICO DE ESPAÑA,

diario que pertenece a este mismo grupo, Prensa Ibérica, Luis Gonçalves, exseleccionador de Mozambique, con la que Reinildo es internacional absoluto desde los 20, con más de 30 convocatorias.

Gonçalves primero ejerció de segundo entrenador de Abel Xavier (2016-2018) para después asumir el rol de técnico principal (2019-2021). Aunque de familia portuguesa, nació en Maputo, la capital del

país africano

, cuyo deporte ha visto evolucionar en los últimos años. ”El fútbol en Mozambique no es fácil. Faltan organizaciones efectivas y profesionalismo, sobre todo por parte de los dirigentes. Es necesario que el campeonato local mejore sus condiciones para que salgan más Reinildos”, defiende.

"Márchate, hijo mío"

Esta situación la evidencia el jugador por el que el Atlético habría desembolsado tres millones más variables al Lille, actual campeón francés. Reinildo no fue uno de esos fichajes precoces que, aún en edad infantil, se marchan a Europa. En 2012, con 18 años, firmó su primer contrato profesional con el Ferroviário, equipo de su Beira natal, la segunda ciudad más poblada de Mozambique y arrasada en 2019 por unas terribles inundaciones.

El lateral colchonero conquista varios títulos, pero sus primeras nóminas no sobrepasan los 30 euros al mes (según fuentes oficiales, cada ciudadano mozambiqueño recibe 26 de media), como el propio jugador confesó en una entrevista con L’Equipe. Hasta que llega 2015, un año clave en la vida de un futbolista que completó estudios de Administración y Dirección de Empresas.

Recibe una oferta del Benfica para militar en su filial, el equipo de sus sueños, y su madre cae gravemente enferma. “Vai, meu filho” (“Márchate, hijo mío”), le dice en su lecho de muerte, una frase, que como él ha recordado más de una vez, resuena en su cabeza a la hora de tomar cualquier decisión. Pocas horas después del funeral, Reinildo, huérfano, viajaba hacia Portugal.

Sin echar la vista atrás, e intentando honrar la memoria de sus padres, buscó generar impacto desde el principio, aunque su condición física estaba lejos de los estándares de las ligas europeas. “Siempre ha sido un jugador inteligente, rápido y agresivo, cualidades a las que ido añadiendo recursos técnicos para convertirse en un lateral moderno, que sube, pero que sobre todo defiende bien”, explica Gonçalves. 

Las virtudes que traía de fábrica le permitieron formar parte de la nómina de jugadores del primer equipo del Benfica para la pretemporada de 2016. La situación no le superó en lo deportivo, pero sí tuvo desafíos emocionales como el hecho de compartir vestuario con el brasileño Jonas, ex del Valencia. Como no se atrevía a saludarlo forzó un encontronazo con él en un entrenamiento. El ariete cayó al suelo y Reinildo le tendió la mano para presentarse a su manera. 

Héroe a préstamo

Una lesión cortó su progresión. Cuando la superó, sus oportunidades en el equipo de Rui Vitória habían desaparecido. No tuvo más remedio que aceptar una cesión por seis meses al Fafe de la Segunda lusa. “Prefería eso que quedarme parado. La experiencia me ayudó a crecer mucho, porque esta competición es mucho más dura físicamente”, contaba en una entrevista con el canal oficial del Lille. 

El Fafe descendió aquel año, pero Reinildo fue tratado como un héroe. “Los aficionados del club no me dejaban salir de casa ni para ir al supermercado. Me decían: ‘¡Tú no juegas como un mercenario! ¡Parece mentira que seas un jugador cedido! ¡Eres el único que siente la camiseta!”. 

Desde aquel curso, posee la imagen de “un generador de buen ambiente en el vestuario”, como señala Gonçalves, una condición que se suma a su voluntariedad, como demostró en su siguiente préstamo al Covilhã (también de segunda) hasta que en el verano de 2018 firma por el Belenenses SAD de la primera portuguesa, donde se presentó como “un lateral”, pero también “como extremo”, o “central” y “hasta nueve”, evidenciando su espíritu competitivo.  Sin él ser consciente, cuaja una magnífica primera vuelta que le brindará su gran oportunidad en el mercado de invierno de 2019.

“Jugábamos contra el Oporto. Estábamos listos para salir al estadio, cuando irrumpe el presidente del Belenenses y le dice a Jorge Silas, mi entrenador: ‘¡Reinildo no puede jugar, va a fichar por el Lille!’. Pensé que era una broma, más que nada porque no había un lateral suplente. Llegamos al Dragao y me confirman la noticia. Sólo hice el calentamiento, pero no toqué una bola por miedo a lesionarme”, contaba para el canal oficial del club francés que pidió su cesión con una opción de compra que finalmente ejecutó.

Mejor lateral de Ligue 1

Desde la secretaría técnica tenían plena confianza en él, a pesar de que jugó cinco minutos en cuatro meses, siempre por detrás del internacional con Mali, Youssouf Koné, que se marcha en el verano de 2019. ¿Era ya su turno? Entonces apareció el croata Bradaric en su camino. Una vez más, trabajo y paciencia desde la segunda fila. La resiliencia por bandera.

Y al fin llegó la consagración, durante la pasada temporada 2019/2020 en la que fue uno de los pilares del título de Ligue 1 conseguido por el Lille frente al todopoderoso

PSG

. Reinildo fue declarado el mejor lateral de un campeonato que celebró envuelto en la bandera de Mozambique, donde fue recibido como un héroe por casi todos. 

“Siempre ha demostrado un orgullo inmenso por sus raíces, sin despegarse de la humildad a pesar del progreso. Él ha asumido el papel de ser ejemplo para millones de jóvenes, que lo reciben en multitud cuando regresa”, explica Luis Gonçalves. Esta consideración le valió para ser condecorado con la Medalla al Mérito Deportivo

“Reinildo va a ser siempre Reinildo. El amigo parlanchín que nunca tiene miedo a soñar y que vive todo con garra y fe”, confesó en la recepción del galardón de manos de Filipe Nyussi, actual presidente del país, quien dijo que su victoria “inspirará a otros atletas y a todos los que luchan por alcanzar metas imposibles”. 

Asalto armado

El baño de masas lo completó el pasado mes de junio con el regalo a sus familiares de una casa en su ciudad natal, Beira, cuya construcción finalizó en mayo, cuando celebró un acto de inauguración. La estrella del mismo fue él, que cogió un micrófono para interpretar 'Batacuios' (“Ladrones”), un tema del artista local Gil Pinto, que habla sobre la criminalidad en los suburbios, con versos como “primero te aprietan el cuello, después de dan una bofetada y finalmente te roban el móvil”. 

Quiso el destino que, después de recibir el reconocimiento del gobierno de Mozambique, unos batacuios intentaran asaltarlo para robarle su recién estrenada Toyota Hillux. Los asaltantes no consiguieron su objetivo y Reinildo acabó refugiándose en una comisaría. También anticipó su regreso a Francia, para olvidarse cuanto antes del incidente y seguir sumando experiencia en el Lille, también en Champions, donde el conjunto galo, como el Atlético, se ha clasificado para octavos de final.

La antítesis de Lodi

El Atlético le seguía la pista desde hace tiempo. Su intención era incorporarlo en julio, pero anticipó el traspaso a enero, mes en el que ha renovado sus ‘alas’ con la suma de Wass como comodín para el lateral derecho (mediocentro reconvertido) tras la salida de Trippier al Newcastle. El lateral izquierdo mozambiqueño competirá con Renan Lodi, del que es su antítesis, y con Mario Hermoso, central que ha disputado encuentros en este flanco, con buen rendimiento ofensivo.

“Reinildo ha perfeccionado sus virtudes defensivas. Ha mejorado en el juego aéreo. Sabe esperar su oportunidad para cortar y demuestra una gran fortaleza en los duelos individuales. Va a ser un recurso con el que Simeone recupere la solvencia atrás”, apunta quien fue su seleccionador en Mozambique, donde ha ido expresando su metamorfosis en el fútbol europeo. 

El Atlético ha apostado por galvanizar su plantilla con esta incorporación para así frenar la sangría de goles. Lleva 26 encajados en lo que va de liga, uno más de los que recibió en contra el curso pasado, cuando se proclamó campeón. Reinildo está en el top 10 de intercepciones de la Ligue 1, supera el 79% de acierto en el pase. Por el contrario, en la actual temporada solo ha marcado un gol y no ha dado ninguna asistencia.

Pero ante el desglose de estadísticas, Luis Gonçalves interrumpe y lanza la siguiente frase: “Tem tudo pra dar certo”, una expresión mozambiqueña cuyo es significado es: “Tiene lo necesario para que esto funcione”. ¿Por qué? “Porque él nunca ha dejado de creer y ese pensamiento está completamente alineado con el Atlético y con Simeone. Reinildo es el mejor ejemplo de que el trabajo genera una mentalidad fuerte y ganadora”.