LEGANÉS, 2 - ESPANYOL, 0

El Espanyol también sucumbe en Leganés

El once blanquiazul acusa el lastre de un gol y una expulsión al filo del descanso y amplía su negra racha con un punto de nueve posibles

Borja Bastón celebra el primer gol del Leganés al Espanyol.

Borja Bastón celebra el primer gol del Leganés al Espanyol. / periodico

Joan Domènech

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Un punto de nueve. Ya es un frenazo. Tres partidos sin ganar (empate con el Fuenlabrada y derrotas con el Girona y con el Leganés) han interrumpido la vigorosa carrera del Espanyol en su ansiado regreso a Primera. El once blanquiazul ha descubierto en sus carnes que el trayecto por la categoría no será tan imperial como apuntaban los resultados.

Lo corroboró al medirse con un igual, otro de los equipos con los que descendió el año pasado junto con el Mallorca. Los tres caídos lideran la tabla, pero se han dado cuenta ya de la pelea que exige la conquista de cada victoria. El Espanyol bajó las brazos a 20 minutos del final, exprimido, sin fuerzas, por el lastre de los dos goles en contra y jugando con uno menos.

De gris a negro

El panorama se tornó gris en los cinco minutos previos al descanso. Primero con el gol de Borja Bastón, gracias a una rápida recuperación de balón local que proyectó al delantero para encarar a Diego López. Inmediatamente después, Miguelón resbaló y tumbó a Arnaiz, que se iba solo a portería. Vio la amarilla, pero ya había visto una antes, lo que le expulsó del encuentro.

Todo pintó negro en la reanudación. Sin tiempo para poder comprobar la reacción a las nuevas instrucciones de Vicente Moreno, que introdujo a Óscar Gil por Mérida para recomponer al equipo, llegó el segundo gol. En una acción muy parecida: imprecisa salida del balón desde atrás y robo de Arnaiz, que se coló entre tres defensas para volver a acribillar al meta gallego.

La reparación se había quedado sin efecto y debía procederse a una nueva intervención. Pero lo que no podía Moreno era cambiar el ánimo de los suyos y mucho menos el de los ajenos. El Leganés ya pudo expresarse con la confianza de haber ganado ya el partido. La renta de un 2-0 suele ser definitiva en una categoría donde todo se decide por detalles mínimos, aunque no insignificantes: un gol, una tarjeta, un error… Y el cuadro madrileño sentía a salvo.

Las señales que emitía el juego, además, abonaban la confianza local. El Espanyol no creó ningún susto como el disparo al larguero de Embarba a la media hora; al contrario, vivió azorado con los riesgos que quiso tomar y que nunca le acercaron al área madrileña.

Ficha técnica

Leganés: Cuéllar (7), Bustinza (7), Tarín (6), Ignasi Miquel (6), Hernández (6), Palencia (6), R. Pérez (7) (Shibasaki (5) m. 58), Pardo (6) (Silva (sc), m. 79) Arnaiz (9) (Bua (5), m. 71), Borja Bastón (8) (De la Fuente (sc), m. 79), Merino (6) (Perea (5), m. 71).

Espanyol: Diego López (7); Miguelón (4), Calero (5) (Lluís López (5), m. 55), Cabrera (6), Pedrosa (6); Embarba (6), David López (6) (Pol Lozano (5), m. 66), Mérida (6) (Gil (5) m. 46); Darder (6), Puado (6) (Baré, (sc), m. 75); De Tomás (5) (Wu Lei (6) m. 66).

Goles: 1-0 (m. 41) Borja Bastón fusila a Diego López. 2-0 (m. 47) Arnaiz se cuela entre tres defensas y remata con la izquierda.

Árbitro: Muñiz Ruiz.

Tarjetas: Miguelón (m. 18 y 44), R. Pérez (m. 52), Darder (m. 92).

Estadio: Butarque.