La afición aguarda para volver a las gradas (en algunos sitios)

Ya no es noticia el fútbol sin afición. Se ha hecho habitual ver publicidad sobre las gradas vacías por televisión. Es la realidad de la temporada del covid, pero no es igual en todos sitios. Mientras LaLiga espera la llegada salvadora de la vacuna, en Europa se empieza a dar cabida a unas aficiones que aguardan a las competiciones europeas,

El anuncio de la UEFA de que la Liga de Campeones permitirá un aforo del 30 por ciento en sus partidos, supeditado a las autoridades de cada país, ha colocado el listón muy por debajo de lo que permiten las ligas nacionales, de las que una decena ha empezado sin público.

Está abierta la opción de que haya un partido de La Liga sin público y, días después en el mismo escenario, uno de Champions con gente en la grada. Ya en la Supercopa de Europa, hace diez días, aficionados del Sevilla estuvieron entre los 15.000 que llenaron el 25% del Puskas Arena, pero todas las situaciones son permanentemente cambiantes y no hay unanimidad ni dentro de cada competición entre los que han empezado a dar cabida al público, la pandemia marca el ritmo y en cada región explotan sus posibilidades.

La Premier y La Liga, por la tele

España no ha abierto el fútbol profesional al público. “Para ver los estadios como los veíamos antes va a ser a partir de la vacuna. Espero que en enero o febrero podamos verlo”, dijo en Movistar Javier Tebas, máximo mandatario de LaLiga, en su última declaración sobre el asunto, hace un mes, cuando las perspectivas eran diferentes. En cualquier caso, la decisión depende del CSD y, en última instancia, de Sanidad. 

Ya ha pasado en baloncesto. Ocho de los 18 equipos de la Euroliga han jugado esta semana con público, entre ellos La Penya (1.200), el Baskonia contra el Madrid (400) y el Zalgiris, que reunió en Kaunas unos 7.500 hinchas, la mitad del aforo.

En el fútbol aficionado, dependiendo de cada Comunidad o Ayuntamiento, se están celebrando partidos con algún centenar de personas. El primer partido de la Liga Iberdrola femenina, ayer en Logroño, también tuvo afición en el campo, como otros tres de la jornada. 

En Inglaterra, donde se anunció el regreso de aficionados a partir del 1 de octubre, se ha paralizado todo después de que el gobierno de Boris Jonshon haya vetado los eventos con más de 1.000 asistentes. En las tres primeras jornadas de la Premier League no ha habido público y parece que va seguir así. 

Alemania a la cabeza

En Alemania, la normativa que acordaron las regiones, como prueba durante seis semanas, estipula que puede haber público en la Bundesliga si la región no supera los 35 contagios por cada 100.000 habitantes en la semana previa al partido. “Será una especie de experimento, un ensayo”, dijo el mandatario bávaro Markus Söder, en cuya región juega el Bayern hoy a puerta cerrada contra el Hertha.

En Berlín la normativa no permite más de 5.000, la cifra de aficionados del Unión Berlín que le vieron ganar el viernes, pero el Borussia Dortmund alojó en su campo casi 10.000, por debajo del 20% de la capacidad, pero más que cualquier otra gran liga. 

Vida tras la suspensión

Francia, la primera gran liga europea que se suspendió la pasada temporada, intentó liderar la vuelta del público al fútbol con 5.000 espectadores en el primer amistoso del PSG. en julio, pero la Ligue 1 ha comenzado con más restricciones, aunque con afición. En las zonas rojas, 28 departamentos, no se permiten eventos que congreguen a más de 1.000 personas. En esa zona está buena parte del noreste francés, además de París, donde el PSG jugó sin público el viernes ante el Angers SCO, el que más aficionados congrega, más de 5.000 y casi el 30% del aforo.

Países Bajos, que también suspendió su liga, permite entre hasta un 35% de público. 

Pruebas para volver

La Serie A ha puesto en marcha un regreso escalonado de los aficionados, de momento 1.000, pese a la proliferación de positivos (11 jugadores en el Genoa y su partido suspendido). 

En Portugal van con pies de plomo. El Santa Clara-Gil Vicente de ayer, de la Primeira Liga, contó con 1.000 espectadores en Sao Miguel, en las Azores, 1.400 kilómetros al oeste de Lisboa.

El ejemplo contrario es el de Rusia, que registró goleadas históricas porque había equipos con la plantilla entera en cuarentena, y ha comenzado la nueva temporada con público. 

Más fútbol con público

En Hungría, donde el Barça tendrá que visitar al Ferencvaros en Champions, el gobierno permitió ya a finales de mayo el acceso de público con tres asientos vacíos y un metro y medio entre cada espectador. Es el club húngaro que más espectadores congrega, algo más de 7.000 de media, un 30% de la capacidad. 

En Suiza se puede llenar dos tercios de los estadios, en Polonia hasta la mitad y en Bielorrusia, la liga que no paró la pandemia, sigo con asistencia asidua de público.