Abro hilo
Donald Trump, Elon Musk, Gavi: los insultos triunfan en los nuevos tiempos
El presidente de EEUU, el magnate y el futbolista del Barça recurren a palabras gruesas y agitan las redes sociales

Trump, esta semana ante el Comité Nacional Republicano del Congreso de EEUU. / Reuters


Daniel G. Sastre
Daniel G. SastrePeriodista
Periodista. Profesor asociado en la UB.
Debe de ser algo relacionado con el nuevo orden mundial, pero esta semana se han perdido definitivamente las formas y se ha normalizado insultar a los adversarios en público. Empezó Elon Musk, acostumbrado a ser pionero en todo: en una nueva muestra de que sus días en la administración de Donald Trump pueden estar llegando a su fin, el hombre más rico del mundo no solo cargó con saña contra los aranceles que han provocado unos días de vértigo en las bolsas de todo el mundo, sino que también se burló de su principal ideólogo.
Estos días las crónicas ponen el foco en la figura de Peter Navarro, el economista que lleva años teorizando acerca de por qué subir los aranceles va a beneficiar a Estados Unidos y que en la actualidad es asesor principal de Comercio del Gobierno. Es también un ídolo para el trumpismo desde que pasó unos meses en prisión acusado de desacato al Congreso tras el asalto al Capitolio de 2021. Navarro es el ideólogo de la guerra comercial emprendida por Trump que ya ha puesto en vilo el dinero de miles de personas en el mundo, empezando por los que más tienen, los 'tecnoligarcas', si se permite el neologismo.
Musk está entre ellos, por supuesto. Esta semana ha dejado clara su oposición a Navarro diciendo que es "imbécil" y "más tonto que un saco de ladrillos". Lo ha hecho usando X, su red social, que sigue siendo el lugar donde dirimir a navajazos las diferencias. Ha sido también en X donde Musk ha lanzado otro ataque a Navarro más sutil y más malévolo: para responder a los ataques del alto cargo de Trump de que Tesla, su empresa de coches, no es lo suficientemente norteamericana, le dijo que preguntara a Ron Vara. Ese nombre, un anagrama de Navarro, es un experto que este inventó para apoyar en el pasado sus puntos de vista sobre los aranceles, hasta que fue descubierto.

El multimillonario Elon Musk. / Europa Press/Contacto/Claudio Giovannini
Que las formas han dejado de tener importancia, incluso en las más altas esferas políticas, lo dejó también claro una vez más Donald Trump en un discurso ante el Comité Nacional Republicano del Congreso. Vestido con un esmoquin impecable, el presidente de EEUU se expresó sin embargo como un "matón de patio de colegio" –así lo ha definido recientemente Felipe González– cuando explicó cómo había reaccionado la comunidad internacional a los aranceles que su país había empezado a aplicar hasta que decidió pausarlos. La vestimenta de gala no impidió a Trump echar mano de un lenguaje soez que, como jugaba en casa, provocó carcajadas entre el público, pero que hace muy poco tiempo habría sido considerado totalmente fuera de lugar.
"No dejéis que algunos de esos políticos vayan por ahí diciendo... ya saben por qué lo digo. Estos países nos están llamando, besándome el culo. Se mueren por llegar a un acuerdo. ‘Por favor, por favor, hazlo. Haré lo que sea. Haré lo que sea, señor’. Y luego veo a algún republicano rebelde, ya saben, algún tipo que quiere destacar, diciendo: ‘Creo que el Congreso debería hacerse cargo de las negociaciones’. Déjenme decirles, ustedes no negocian como yo lo hago", soltó Trump frente a los miembros de su partido.
En las redes sociales hay quien estima que el presidente de EEUU es un genio que va a salirse con la suya y hay quien piensa que su bocaza va a dar al traste con cualquier posibilidad de éxito que pudiera tener su intermitente ofensiva arancelaria. "Esto da vergüenza ajena. Vaya forma de abordar las relaciones exteriores. Vaya forma de tirar por la borda todo el prestigio de un gran país como EEUU", dice por ejemplo @elentirvigo. Otros, como el escritor Juan José Millás, hacen un análisis más gramatical: "Gracias a la invención del sentido figurado sabemos que besarle el culo a Trump no significa que se lo tengamos que besar. Es un alivio".

El presidente estadounidense, Donald Trump / Europa Press/Contacto/Chris Kleponis - Pool via CN
Completamente ajeno, que se sepa, al ámbito político, el jugador del Barcelona Pablo Páez Gaviria, conocido como Gavi, también ha sucumbido esta semana a los encantos del lenguaje chabacano. Solo tiene 20 años, pero su precocidad futbolística –debutó con el Barça y con la selección española con 17 años, y ya ha ganado títulos y jugado un Mundial– ha hecho que ya sea una de las voces más autorizadas dentro del vestuario. El martes volvió a demostrar que habla como juega: con un estilo directo, descarado y casi desafiante. Y que no se deja amilanar.
Durante la rueda de prensa de ese día, un periodista le preguntó si no le molesta que, sobre todo en medios más o menos madridistas, no se le considere un buen futbolista, sino lo que se conoce coloquialmente como un leñero. "Se te tacha de ser un jugador muy físico, duro, y no se tiene en cuenta tu calidad técnica", dijo el informador. Y Gavi, que venía de marcar un gol de gran clase frente al Betis, no se mordió la lengua: "Es cierto lo que dices. Mucha gente se cree que no sé jugar a fútbol. No tienen ni puta idea. Pero bueno, es entendible, al final es fútbol, cada uno piensa lo que quiere y está bien".
Gavi apenas pudo avalar sus palabras con hechos en la goleada que el Barça propinó al Borussia Dortmund en el partido inmediatamente posterior a esas declaraciones: el entrenador de su equipo, Hansi Flick, decidió que no fuera titular. Sí entró en el campo unos minutos hacia el final del encuentro, y lo hizo bien, como casi siempre.
Pero el partido sí sirvió para recibir en las redes sociales el apoyo de sus compañeros. Gavi celebró la victoria con una publicación en Instagram en la que se le ve celebrando un gol frente al Dortmund junto a Lamine Yamal. Y ese jugador le responde desde su cuenta: "'Mihermano' no tienen ni puta idea".

Pablo Páez Gavira, Gavi, en la sala de prensa de Sant Joan Despí. / AFP7 vía Europa Press / AFP7 vía Europa Press
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