El asombroso caso de la gallina de los huevos 'matrioska'

Romper un huevo para hacer una tortilla o freírlo y encontrarse dos yemas. No es lo normal, pero suele pasar y es una sorpresa agradable. Aunque despierta algunas preguntas, como por qué se da este fenómeno. Lo que ya no es tan usual es cascar un huevo y encontrar dentro... otro huevo con su cáscara, yema y clara. Posible es, ya que una de las gallinas de Dolores Ibarzo, vecina del pueblo zaragozano de Mesones de Isuela, ya ha puesto dos así en apenas dos meses. Esta es la historia del huevo 'matrioska' más viral del país.

La vida rural tiene beneficios como del que disfruta de Dolores, que tiene una docena de aves en casa. Cada día recoge sus frutos, y los reparte entre los familiares y vecinos. Porque no hay nada como comer un huevo de casa, las cosas como son. Si es frito, es el súmmum. Que se aparten los del supermercado cuando pruebas unos camperos de verdad.

El doble de grande que los demás

El caso es que hace un par de meses, una de sus gallinas puso un huevo más grande de lo normal. De media, uno suele pesar 60 gramos. Ese pesaba 140 y, como es lógico, no pasó desapercibido. Romperlo fue como abrir una muñeca rusa o un Huevo Kinder: dentro había la yema, la clara y otro huevo con cáscara y bien formado.

"Mi hermano vio a la gallina tan apurada por intentar sacar el huevo que creía que se iba a morir", comentó Dolores el pasado sábado 12 de noviembre. Sin embargo, no tuvieron la opción de grabar el extraordinario acontecimiento.

Sorpresa de 125 gramos

Como los huevos con dos yemas, esta situación está relacionada con una alteración de las hormonas de las gallinas y una atrofia en uno de los oviductos, que provoca que el óvulo retroceda en lugar de avanzar. Si esto coincide con una nueva ovulación, se forma otro huevo que envuelve al anterior, explican los expertos.

Sea como fuera, la gallina volvió a poner otro de tamaño sin igual hace un par de semanas. Lo hizo con la ayuda. "Parecía uno de avestruz", cuenta Dolores. es que pesaba 125 gramos. No dudaron en pensar que se trataba de otro huevo 'matrioska' y quisieron documentar el asombroso caso.

Vídeo viral en TikTok

Llamaron al periodista Alfonso Andrés, que es vecino del pueblo. Cámara en mano, cascó el huevo para ver qué había en su interior. No iban desencaminados: era un huevo con otro dentro, los dos bien formados con sus yemas y claras. Andrés colgó en TikTok el pasado 2 de noviembre. Desde entonces, ya suma 1,5 millones de reproducciones y casi 30.000 'likes'.

El huevo de la gallina de Dolores es el más viral del país, pero no es único Kinder documentado. En abril de 2020, una ave de Badajoz hizo una doble gesta: puso un con dos yemas y, además, con otro huevo perfectamente formado. Lo mejor de todo es que además de ser sorprendentes, estos huevos son perfecta y deliciosamente comestibles.