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Nicole Shanahan, la espinosa aventura de Elon Musk

El devaneo del CEO de Tesla con la abogada ha roto su matrimonio con Sergey Brin, cofundador de Google, y la relación entre los magnates

La abogada Nicole Shanahan

La abogada Nicole Shanahan / Billy Bennight / Zuma

Natalia Araguás

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El hombre más rico del mundo, Elon Musk, de rodillas en una fiesta frente al cofundador de Google Sergey Brin, suplicándole perdón por haberse acostado con su mujer. Esta suculenta estampa, recogida por 'The Wall Street Journal', ha puesto en el disparadero a Nicole Shanahan (Oakland, 1985), abogada, empresaria y filántropa que obtuvo fama mundial en 2019 por su matrimonio con Sergey Brin, con quien tiene una hija de cuatro años. La supuesta aventura de Shanahan con el CEO de Tesla durante la feria Art Basel en Miami el pasado diciembre se habría llevado por delante, además de un matrimonio maltrecho por los rigores de la crianza durante la pandemia, la larga amistad entre los dos magnates.

Aunque Elon Musk ha negado el devaneo –"no he tenido sexo en mucho tiempo", se defendía en Twitter– el episodio ya ha tenido implicaciones empresariales. El cofundador de Google, que durante la crisis financiera de 2008 no dudó en invertir medio millón de dólares en Tesla, ha ordenado a sus asesores financieros retirar todas sus inversiones en las empresas de Elon Musk, con una fortuna valorada en 242.000 millones de dólares. Sergey Brin ocupa, por su parte, el octavo puesto en el ranking de fortunas mundiales, con un patrimonio neto de 94.600 millones de dólares.  

Hija de empleada doméstica y padre con trastorno bipolar, su infancia estuvo marcada por el caos y la escasez

Tan elitista triángulo amoroso lo completa Nicole Shanahan, de 37 años y orígenes humildes. Hija de una emigrante china que trabajaba de empleada doméstica, con un padre diagnosticado de esquizofrenia bipolar cuando ella tenía solo nueve años, su infancia estuvo marcada, además de por la escasez económica, por el caos. Shanahan ha confesado que salió adelante gracias a las redes de asistencia pública que aún existían en los 90 en Estados Unidos y se declara una mujer comprometida con la justicia social y la lucha contra el cambio climático. Consiguió graduarse en la Universidad de Puget Sound, donde cursó economía, estudios asiáticos y chino mandarín. Se licenció en Derecho en la Universidad de Santa Clara y también realizó un intercambio en la Universidad Nacional de Singapur.

Congelar embriones

En su perfil de Linkedin, esta abogada que ejerce en California destaca su actividad como investigadora en CodeX, el Centro de Informática Jurídica de Standford. También es CEO y fundadora de la empresa de tecnología legal ClearAccessIP y la Fundación Bia-Echo, que tiene entre sus misiones alargar la fertilidad femenina, una cuestión personal. "Al igual que muchas mujeres que no están listas para formar una familia a los 30 años, decidí tomar el asunto en mis propias manos y congelar embriones", explicó en un emotivo discurso en 2019.

"Sin embargo, después de tres intentos fallidos de producción de embriones y tres docenas de visitas a clínicas de fertilización in vitro en el Área de la Bahía, aprendí que no era tan inquebrantable como pensaba". Antes de que saltara la polémica, Shanahan se declaraba optimista sobre cómo podía crecer en su rol filantrópico tras el divorcio de Sergey Brin, del cual en la actualidad negocia los términos. Ella aspira a lograr mil millones de dólares, pese a la existencia de un acuerdo prematrimonial cuyas cláusulas son, por ahora, un secreto.

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