Así ordena los restos de gamba un "trasTOCado"

Un plato de gambas

Un plato de gambas

Lola Gutiérrez

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Hay clientes de bares y restaurantes que, sin duda, se merecen todos los zascas del mundo: desde el que se queja de que no le invitan a chupito al que pone una mala crítica porque exige que le sirvan cuando pasan 7 minutos de la hora de cierre de cocina.

Aunque también están los bares que ponen la tarificación horaria y solo te dejan estar media hora si te tomas una caña o un refresco, ampliando la permisividad de la estancia a hora y media si cenas algo.

Pero el caso de este cliente de un bar de Tenerife es diferente. La persona en cuestión -no se especifica si es hombre o mujer- ha pedido un plato de camarones (o gambas) y ha devuelto el plato perfectamente ordenado: las cabezas arriba, las peladuras del cuerpo en medio y las colitas por abajo".

"Ayer un cliente en el bar, después de pedir camarones y comérselos, devolvió el plato así", Ha compartido un restaurador este lunes en su cuenta de Twitter junto a una foto que refleja a la perfección el arte de pelar camarones en Tenerife.

Las reacciones no se han hecho esperar. Y, por supuesto, casi todas apuntan en la misma dirección, asegurando que lo que sufre esa persona es un TOC (Trastorno Obsesivo Compulsivo) como una casa.

Pero, a la vez, ha servido para que muchos tuiteros saquen a la palestra sus propias manías, como los que ordenan las conchas de mejillones, almejas o tallarinas y comprenden al comensal de los camarones, asegurando que solo son "manías".

Finalmente, los hay que han querido burlarse de la forma de ordenar, señalando supuestos errores, como que el espacio que deja entre cabezas, cáscaras centrales y colas no es simétrico o que hay al menos una cabeza y una cola de gamba que no están perfectamente alineadas.