INVESTIGACIÓN CON 384 FAMILIAS

Los padres sí tienen un hijo favorito, según un nuevo estudio

Sociólogos de la Universidad de California concluyen, tras tres años de trabajos, que el preferido es el mayor

Una madre pasea con sus dos hijos, en una imagen de archivo.

Una madre pasea con sus dos hijos, en una imagen de archivo. / periodico

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Los padres siempre aseguran que quieren a todos sus hijos por igual, y que de ninguna manera tienen un hijo favorito. Bien, pues un nuevo estudio de la Universidad de California-Davis dirigido por la socióloga Katherine Conger les lleva la contraria: los padres sí tienen un hijo preferido, y suele ser el mayor.

El estudio sobre el trato que los padres dan a cada hijo y la percepción que este tiene de ello se realizó durante tres años con 384 parejas de hermanos adolescentes y sus padres (768, entre padres y madres). Las 384 familias analizadas eran familias formadas por el matrimonio (no había divorciados) y dos hijos que habían nacido con 4 años de diferencia.

El 70% de las madres y el 74% de los padres admitieron tener un hijo favorito. No especificaron quién era el favorito, el mayor o el pequeño. Sin embargo, los resultados sugieren a los investigadores que es el primer vástago el que normalmente es el preferido.

EFECTO EN LA AUTOESTIMA

A todos los adolescentes participantes en el estudio se les preguntó si sentían que sus padres les trataban diferente que a sus hermanos y si creían que eso les había afectado la autoestima. La investigación reveló que hay un índice más elevado de baja autoestima entre los hermanos menores, causada por el favoritismo de los padres por el primogénito. En cambio, el trato diferencial apenas parece afectar a la autoestima de los mayores.

La doctora Conger ha manifestado su sorpresa por el resultado en tanto que pensaba que serían los hermanos mayores quienes se iban a sentir peor tratados por sus padres. "Nuestra hipótesis de partida era que los hijos mayores, los primogénitos, estarían más afectados por la percepción de que recibían un trato diferente por su condición de hijos mayores en la familia", ha apuntado.

En todo caso, Conger admite que todos los adolescentes participantes en el estudio, ya fueran los primogénitos o los hijos pequeños, se sentían injustamente tratados por sus padres. "Todo el mundo siente que a su hermano o su hermana le están tratando mejor. Así que tanto unos como otros aprecian un trato diferencial".