CAMINO A LA EUROCOPA

La vacunación de la selección española genera un debate nacional

La Comisión de Salud Pública no se pronuncia sobre la petición de vacunar a los futbolistas

Entre la polémica social y política, el proceso se retrasa a cinco días del debut en la Eurocopa

Seis futbolistas componen una burbuja alternativa por si tienen que sustituir a alguna baja

Entrenamiento selección futbol        David Castro

Entrenamiento selección futbol David Castro / David Castro

Alejandro García

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José Manuel Franco, presidente del Consejo Superior de Deportes, confirmó este martes por la mañana las noticias filtradas el día anterior: “La Comisión de Salud Pública va a decidir y este miércoles van a estar todos vacunados”, dijo, pero por la tarde el órgano público se inhibió de la decisión, argumentó que no era competencia suya decidir sobre la vacunación de la selección española de fútbol antes de la Eurocopa y la pelota vuelve al tejado de Sanidad, todo mientras se acerca el torneo y se agota el tiempo. 

Pese al revés inesperado y a que se impone la precipitación y la nula previsión con la que se ha acometido este proceso, la decisión está tomada y anunciada por el Gobierno y va a tener lugar este miércoles, en el Consejo Interterritorial de Salud, un nuevo intento para aprobarlo. En cualquier momento en el que se ejecute la vacunación, la selección no va a llegar inmunizada al primer partido de la Eurocopa. “No sabíamos los convocados hasta el día 24 de mayo. A partir de ese día se empezó a hablar de la necesidad de vacunar a los jugadores y el viernes se procedió a la petición oficial”, justificó sin mucho contenido Franco.

La decisión del Gobierno ha dejado controversias aquí y allí, entre defensores y detractores de adelantar en el orden de vacunación a los internacionales absolutos de la selección de fútbol, después de que ya se hiciera algo similar con todos los españoles que van a acudir a los Juegos Olímpicos de Tokio. “Yo no soy consciente del revuelo. Lo que hemos hecho es lo mejor para nuestros jugadores”, se excusó en Radio Marca el presidente de la Federación, Luis Rubiales, pero lo cierto es que hay agitación entre el debate social y la gresca política acerca de supuestos privilegios. 

El plan alternativo

El plan es que se vacune a toda la expedición, al cuerpo técnico de Luis Enrique, a los futbolistas citados en la lista inicial de convocados y a los seis que conforman la llamada burbuja paralela creada para responder ante nuevas posibles bajas por coronavirus.

Los jugadores de la selección se están realizando una tanda de test para detectar el coronavirus cada día, con especial tensión tras el positivo de Busquets. El primer día después de la baja del barcelonista no hubo ningún positivo, pero el riesgo de que aparezcan nuevos positivos permanece. 

Para valorar una posible sustitución definitiva de Busquets y, sobre todo, para tener recursos ante otros contagios que puedan aparecer, la selección ha creado una reserva de internacionales que ya entrenan en Las Rozas, aislados del resto por si tienen que incorporarse al grupo, y así van a estar hasta el sábado, hasta que venza el plazo de 48 horas antes del debut del lunes que tiene Luis Enrique para decidir si sustituye a Busquets, o a otro positivo que aparezca.

Estar preparados

“Necesitamos estar preparados por si tenemos otro contratiempo, hemos traído más jugadores como prevención”, reconoció José Molina, director deportivo de la Selección. A partir de ese momento, no se podrán hacer más modificaciones en la lista, salvo por coronavirus o lesión grave de un portero. 

Los últimos en llegar han sido el portero Kepa Arrizabalaga y el defensa Raúl Albiol; en la tarde del lunes hicieron acto de presencia los centrocampistas Pablo Fornals y Carlos Soler, además del atacante Rodrigo Moreno y del extremo Brais Méndez. “Gracias. Ha sido acojonante llamaros, pero es imposible encontrar más predisposición y ganas”, les dijo el seleccionador a su llegada, antes de dirigirlos en su primer entrenamiento, al margen del trabajo individualizado que está realizando la convocatoria principal. 

El caso de la selección española no es único. Solo Polonia, Turquía e Italia se han vacunado al completo, muchos países han dado la opción a sus jugadores y otros no han vacunado. Además, el primer rival de los de Luis Enrique también ha sufrido dos casos positivos, uno de ellos de su gran estrella, el extremo de la Juventus Dejan Kulusevski, que no estará en el debut de España en La Cartuja de Sevilla. 

Otro malestar que ronda a la selección es el de la afición, que primero sufrió el cambio de sede de Bilbao a Sevilla y ahora se ha encontrado con restricciones de acceso a La Cartuja. La UEFA ha anunciado que todos los aficionados, también los vacunados, tendrán que presentar a la entrada una prueba PCR negativa realizada 72 horas antes del partido, o un test de antígenos en las 24 horas precedentes al choque.