080 Barcelona Fashion
Ernesto Naranjo: "Con John Galliano aprendí lo mejor y lo peor de la moda"
El diseñador de Pilas (Sevilla) debuta en la Semana de la Moda catalana tras conquistar París y Madrid. Su proyecto bascula entre la familia, su inspiración, y el rescate de la tradición artesana
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Retrato del diseñador Ernesto Naranjo, que este abril debuta en 080 Barcelona Fashion. / ERNESTO NARANJO


Laura Estirado
Laura EstiradoPeriodista
Ernesto Naranjo (Pilas; Sevilla, 1991) visita por primera vez 080 Barcelona Fashion. Forma parte del nutrido grupo de debutantes de esta 35ª edición. Trae su colección 14, inspirada en las 'ziegfeld girls', las coristas que actuaban en los espectáculos de Broadway, al estilo de las bailarinas del Folies Bergère de París. Desde que constituyó su marca en 2018, con atelier en Madrid y talleres de artesanos en el sur, la mujer está en el centro de sus diseños dramáticos, irónicos y con tendencia a la geometría.
Llega a Barcelona con un currículum de lujo.
Ya estaba estudiando en Londres, cuando en 2014 gané la pasarela EGO en Madrid Fashion Week. Me gradué en la Central Saint Martins, y presenté una colección en la London Fashion Week con el apoyo de la Beca Alexander McQueen. El máster lo hice trabajando en París. Mi marca ya estaba ahí, funcionando de una manera oculta, hasta que me decidí a lanzarla en 2018. Elisa Palomino, una profesora que tuve en la universidad, siempre me decía 'trabaja para otros primero; equivócate con su dinero'.
Usted ha trabajado para algunos de los más grandes.
Gracias a la universidad tenía contactos con muchas empresas del sector, sobre todo de París. He trabajado con Balmain, con Olivier Rousteing, en la segunda colección que diseñaba para la casa, y luego, me salió la oportunidad de trabajar con John Galliano. Mi tutor también había sido su tutor. Me dijo que le había enviado mi portfolio y que le había gustado mucho, y me llamó para trabajar en su nuevo y secreto trabajo.
¿Secreto?
Sí, me citaron en un apartamento que tenía al lado del Palais Royal de París, y me hicieron firmar un contrato de confidencialidad para que no dijera que Galliano iba a ser el nuevo director creativo de Maison Margiela. Era su regreso a la moda después del escándalo de Dior.
"Los diseñadores de mi generación no queremos que la moda atropelle nuestra vida personal"
¡Menudas prácticas!
Bueno, al principio fueron prácticas, pero luego me contrataron. Trabajaba mano a mano con John todo el tiempo. Con Galliano aprendí lo mejor y lo peor de la moda. Realmente, la presión de trabajar con este tipo de creativos es brutal, porque estás todo el día involucrado en un proyecto, con una expectativa muy alta. Hay una generación de diseñadores de los 90 y principios de los 2000 que lo han dado todo por la moda, pero yo creo que la moda nos encanta, pero es solo parte de lo que hacemos. Los diseñadores de mi generación no queremos que la moda atropelle nuestra vida personal. En Margiela he aprendido mucho de lo creativo pero también mucho de lo que la moda puede acarrearte si no la sabes manejar.
¿Es un poco el baile de sillas con los cambios de diseñadores en las grandes casas que estamos viviendo las últimas semanas?
Al final, ellos son las caras visibles, pero detrás están los grupos empresariales que son los que manejan los hilos y a los que nadie les echa la culpa de nada. Y la gente se quema al final, porque las empresas solo quieren vender y vender, y no hay nada más detrás de esas ventas. El John que he conocido en Margiela ya no era el de los excesos de Dior, cuando sacaba 36 colecciones año. Obviamente trabajábamos muchísimo, pero siempre me decía 'step by step'. Y eso me lo he grabado en la piel, voy a hacerlo todo poco a poco y de una forma constante.
Pero el consumidor quiere novedades todo el tiempo.
Claro, pero si queremos que la gente siga haciendo cosas creativas hay que darles su tiempo.
¿Usted goza de él?
Tengo mi propia marca, soy 'freelance' para otras firmas internacionales y soy profesor en varias universidades. Pero el viernes por la noche tengo que quedar sí o sí para tomarme una cerveza con mis amigos.
"Si queremos que la gente siga haciendo cosas creativas, hay que darles su tiempo"
¿Y lo de trabajar para otras marcas además de la suya?
Al principio era porque la mía aún no daba dinero. Ahora sí. Pero trabajar con otros también te da una visión más global del negocio. Ahora estoy haciendo un proyecto para una marca de Los Ángeles, he hecho cosas en Hong Kong y en Tokio...
¿Qué le atrae de la plataforma 080?
La he seguido desde el principio y estaba muy interesado en lo que están haciendo internacionalmente, la prensa y los 'influencers' de fuera, y como mi marca está creciendo bastante, he visto el momento de volver al desfile al uso de una plataforma oficial. Además, el espacio, Sant Pau, también me parecía muy interesante para la marca.
¿Considera que desde aquí se apoya a los nuevos creadores?
Sí, muchísimo. Somos bastantes y tenemos muchas cosas en común. El año pasado, creé una agrupación de diseñadores. Porque íbamos a París, a los 'showrooms', en solitario y no acababa de funcionar. Con Carlota Barrera, Palomo Spain, Paula Cánovas del Vas, Dominnico, Juan Vidal, Moisés Nieto, ManéMané, Leandro Cano..., hemos lanzado GenSpain, para regenerar lo que fue el 'Made in Spain'.
"Con Carlota Barrera, Palomo Spain, Paula Cánovas del Vas, Dominnico, Juan Vidal, Moisés Nieto, ManéMané, Leandro Cano... hemos lanzado GenSpain, para regenerar lo que fue el 'Made in Spain'"
¿Y en qué consiste?
En dar a conocer la moda que se hace hoy en España, porque tú vas afuera y la gente solo conoce Inditex. Se trata de difundir esa imagen GenSpain, pero con ese toque internacional más allá de las 'BBC', de las bodas, bautizos y comuniones, lo típico que la gente consume en España.
Mira usted mucho fuera, pero ama profundamente la artesanía española.
Exacto. Utilizo muchos elementos de la tradición andaluza, como son los madroños, los flecos, el macramé, los bolsos de Ubrique... Es decir, intento mantener esa artesanía, mantener esos trabajos tan bien hechos, pero adaptado a un público contemporáneo e internacional.
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