Joyas 'top' de plástico

Adriana Manso, diseñadora de los anillos de plástico de Madonna, Miley Cyrus, Bad Gyal...: "Aún me sigue petando la cabeza"

Descaro, diversión y "un poquito de morro". Hablamos con la fundadora de La Manso, que hace cinco años creó de la nada la marca de bisutería de lujo que hoy marca tendencia en todo el mundo

Adriana Manso, creadora de la firma de bisutería de plástico de lujo La Manso, en el CaixaForum de Barcelona.

Adriana Manso, creadora de la firma de bisutería de plástico de lujo La Manso, en el CaixaForum de Barcelona. / MARC ASENSIO

Laura Estirado

Laura Estirado

Barcelona
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"Antes de 2019 yo me dedicaba a la iluminación escénica y mi hobby era la bisutería. En la calle del Call del centro de Barelona encontraba todas las tiendas de abalorios que necesitaba para montar mis piezas. Ahora, mi mundo es la bisutería de lujo y mi hobby, el teatro". El pasado viernes, Adriana Manso (Barcelona, 1994) participó en el ciclo 'Encuentros con...' de CaixaForum Barcelona para hablar de su trayectoria, una de las más fulgurantes en el mundo de la moda y el diseño de los últimos años. El caso de la diseñadora, artista y "creadora", como a ella le gusta definirse, es digno de estudiarse en las escuelas de negocios. Emprendedores, tomen nota.

Su marca no solo se ha consolidado como referente de la bisutería de lujo contemporánea en las revistas más prestigiosas, desde 'Vogue' a 'Vanity Fair' o 'WWD', sino que celebridades como Madonna, Miley Cyrus, Bella Hadid, Dua Lipa, Rosalía, Bad Byal, Nathy Peluso, Nicki Minaj, las hermana Kardashian-Jenner o Lily-Rose Depp lucen con orgullo sus sortijas, sinónimo de extravagancia y diversión.

Un 'hype' viral para la marca que ha culminado hace unos meses con una colaboración gloriosa con Florence Tétier, nada más y nada menos que la directora creativa de Jean Paul Gaultier, y con la apertura de su primera tienda física, en el número 20 de Enric Granados, un local que es una obra maestra de diseño modernista, como las creaciones que vende en su interior.

'Life in plastic is fantastic'

Rienda suelta al espíritu 'life in plastic is fantastic' de los 90, La Manso ha sabido reinterpretar para las nuevas generaciones un lujo aspiracional, pero asequible, con grandes dosis de humor, carisma y desenfado. "Algo gamberro", para ser exactos.

Hablamos con Adriana Manso, para que nos cuente las claves de su éxito y cómo en tan poco tiempo ha revolucionado el mercado de la bisutería con sus icónicos anillos de plástico multicolor.

"Tenía 25 años y 300 euros como inversión inicial, con lo que compré un buen 'stock' de piezas variadas para ir haciendo joyas en casa -explica a este diario-. Desde pequeña me compraba la 'Super Pop', que venía con anillos y pulseras de plástico que me encantaban. Además, mi abuela tenía un montón de joyas de baquelita [la primera sustancia plástica totalmente sintética] que coleccionaba. De ahí supongo me viene el gusto por este material".

Aunque sus diseños son de lo más originales, llamativos y extravagantes en forma y colores, para la entrevista con este diario Adriana ha venido este martes "en plan minimal". "Con resaca aún del fin de semana", pues cumplió los 30 el viernes pasado. Pantalón, sudadera, visera y zapatillas rosas, a juego con un único anillo con apliques blancos imitando unas perlas para el dedo corazón. Uno de los modelos 'best-sellers' de La Manso.

El plástico, un trampantojo

Alguien podría pensar que "plástico reciclado" y "lujo" son términos contradictorios, pero Adriana no lo ve así: "Es un material que te permite crear formas, colores e imitar elementos de la naturaleza como huesos de animales sin tener que hacer uso de verdad de ellos, lo cual me parece un punto muy a favor. Es eso que tiene de trampantojo el plástico que le da mucha gracia y me permite prácticamente reproducir cualquier cosa".

En su caso, reconoce, que tuvo "un poco de suerte", porque en la época en la que lanzó La Mansó "no había muchas marcas que se posicionaran en un lujo de plástico, y con esta propuesta de precios", observa la creadora, que sitúa los de su firma "a partir de los 50 euros, aunque algunas piezas pueden alcanzar los 400", asegura.

Enseguida tuvo claro que su pasión iba bien encaminada. "Está feo que yo lo diga, pero creo que soy de esas personas que crean tendencias, y me parece que es porque no estoy pendiente de lo que pasa a mi alrededor, de lo que hacen otros, o la competencia, ¿sabes? Intento siempre hacer ese ejercicio, porque si no es así, caes constantemente en pensar que te estás pisando con los demás".

De festival en festival

Y así, con toda esa dosis de valentía, y de creer en una misma al más no poder, hace cinco años Adriana se presentaba en festivales como el Primavera Sound o en alguna fiesta con famosos con su caja de anillos 'vintage'. "Se los regalaba a quien me gustaba. Recuerdo, por ejemplo, que le di uno a [la 'influencer' y empresaria de moda] Blanca Miró, que la conocí en un evento de Isabel Marant donde me había colado. Aquello se convirtió en una especie de mercado, se formó un corro y todo el mundo quería comprarme", recuerda. "No solo chicas jóvenes, también mujeres más mayores, porque lo bonito de esta marca es que no tiene edad ni sexo, ni un target determinado. Muchas clientas ahorran para comprarse un anillo, me parece super especial. Es lujo de plástico, pero cualquiera se lo puede permitir", considera.

Al principio, con sus dos manos se bastaba, para comprar el material, diseñar las joyas, llevar la web de la firma y la página de Instagram. Pero cuando tenía picos de demanda echaba mano de un par de amigas [ahora, en su taller de la plaza Reial son 13 trabajadoras]. Hasta que todo lo cambió Miley Cyrus y su vídeo 'Midnight Sky' (2020). "El primer ejercicio oficial creo que no llegamos a los tres millones de facturación, pero se acercaba", rememora Manso.

"Nos escribió uno de sus estilistas, pero era una persona que no tenía muchos seguidores y en su página solo tenía cuatro fotos de Miley, como cogida e Getty o por ahí. No nos pareció de su equipo habitual. Nos pedía un montón de anillos, como 28, para un anuncio o algo así. No teníamos claro que fuera en serio. Pero se los enviamos. Al poco, nos escribió dándonos las gracias, aunque al final no los habían usado, pero se los quedaba por si acaso. Pensamos que era muy crack consiguiendo cosas... y nos olvidamos del tema. Y al cabo de unos meses salió el videoclip", narra.

En el corto musical, la cantante de 'Wrecking Ball' se retuerce en una cama de bolas a lo 'American Pie', vestida con marcas como Gucci, Chanel y Saint Laurent... y La Manso. "Comenzaron a etiquetarnos en un montón de 'stories'; eso nos situó en ese nivel de verdaderas marcas de lujo consagradas", confirma la creadora.

Al futuro, Manso le pide un poco de "calma y confort", pues en estos cinco años "ha habido mucha pasión, pero también mucho sufrimiento". No descarta abrir más tiendas ni experimentar con otros productos, como ya ha hecho con camisetas y bolsos, pero sin olvidar su centro, la bisutería de plástico, "donde siempre me he sentido más segura", concluye.

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