Espacio social

Esplugues compra el Monasterio de Santa María de Montsió por 7 millones para preservar su legado histórico

El Ayuntamiento adquiere el conjunto arquitectónico, que incluye la masía modernista de Can Casanovas, con el objetivo de convertirlo en un espacio cultural y social accesible para la ciudadanía

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El alcalde de Esplugues con Sor María Lucía Caram en el Monasterio de Santa María de Montsió

El alcalde de Esplugues con Sor María Lucía Caram en el Monasterio de Santa María de Montsió / El Periódico

Clàudia Mas

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El Ayuntamiento de Esplugues de Llobregat ha adquirido el Monasterio de Santa María de Montsió y la masía modernista de Can Casanovas, por un total de 7 millones de euros. Esta compra, orientada a la preservación y rehabilitación de dos edificios emblemáticos del municipio, se financiará mediante una modificación presupuestaria de 3,5 millones de euros que se aprobará en el presupuesto ordinario de octubre.

El acuerdo de compra se ha formalizado este jueves, 24 de octubre, con las comunidades religiosas propietarias: el Monasterio de Nuestra Señora de los Ángeles y Santa Clara de Manresa, y el Monasterio de Sant Cugat del Vallès.

Es un paso muy importante para la protección del patrimonio histórico y artístico local, ya que estamos hablando de elementos de gran valor que queremos preservar para las futuras generaciones”, ha declarado el nuevo alcalde de Esplugues, Eduard Sanz (PSC), que ha celebrado la adquisición como un avance clave para la ciudad.

El Monasterio de Santa María de Montsió, de estilo gótico y fundado en el siglo XIV, ha sido testigo de más de seis siglos de historia. Su claustro gótico fue trasladado piedra a piedra hasta Esplugues en 1947, después de haber pasado por diversas de Barcelona, primero junto al actual Portal de l’Àngel, y más tarde en la rambla de Catalunya a la altura de Rosselló. El recinto, que además incluye una portada y una fuente gótica del siglo XV, se convirtió desde entonces en un emblema del patrimonio local. La adquisición también incluye la masía modernista de Can Casanovas, diseñada por Antoni M. Gallissà en el siglo XIX, otro símbolo cultural de la ciudad, según ha señalado el mismo alcalde.

Algunas de las piedras del claustro aún conservan los números grabados cuando, en su momento, fueron marcadas para proceder a su desmontaje en Barcelona y posterior reconstrucción en Esplugues, piedra por piedra. Este proceso formó parte de una compleja restauración preservando así la integridad de una estructura que ha sido testigo de seis siglos de historia.

Sor Lucía Caram con el alcalde d'Esplgues en el monasterio de la ciudad

Sor Lucía Caram, el alcalde d'Esplugues y Sor María del Carmen Horillo en el monasterio de la ciudad / ACN

Un proyecto cultural y social

Más allá de la preservación del valor histórico del monasterio y la masía, el objetivo del Ayuntamiento es convertir este espacio en un punto neurálgico para la vida ciudadana, algo que Sor María Lucía Caram ha alertado durante la presentación del acuerdo: “No queremos que se pierda la memoria de dónde venimos y hacia dónde vamos. Por eso, pedimos al alcalde y hacerlo accesible a la ciudadanía, con actividades culturales estables que lo mantengan vivo”, ha asegurado.

De hecho, el Ayuntamiento ya ha señalado su intención de solicitar que el Monasterio sea declarado Bien Cultural de Interés Nacional, lo que facilitaría la obtención de recursos de otras administraciones para financiar su rehabilitación.

La ubicación estratégica del Monasterio, en el núcleo histórico de Esplugues y a pocos metros del Parque de los Torrents —un pulmón verde de la ciudad—, permitirá integrar este espacio en un entorno natural privilegiado. La rehabilitación del conjunto arquitectónico se verá complementada con proyectos que buscarán darle una “vida propia”, según las palabras del alcalde, garantizando su utilización por parte de la ciudadanía para eventos culturales, educativos y comunitarios.