Espanyol: regreso al infierno

Hay viajes que nunca se quieren repetir, experiencias traumáticas que es mejor olvidar y hacer lo posible para iniciar una nueva vida. Ese era el objetivo del Espanyol después de consumar su primer descenso a Segunda en 27 años en el verano de 2020, tras la nefasta miniliga del covid.

El 19 de julio de 2020 finalizó el campeonato que llevó al cuadro perico a la categoría de plata. El colista se despidió con un triste empate en Cornellà ante el Celta (0-0) y el deseo inmediato de volver a la élite cuanto antes. Lo logró al año siguiente con Vicente Moreno en el banquillo y se mantuvo en Primera con solvencia el curso pasado, sin llegar a ocupar ni una sola jornada la zona de alarma.

Vuelven los fantasmas

Este domingo, en cambio, regresaron los peores fantasmas, que confirmaron la decepcionante dinámica del equipo, solo aliviada con alguna alegría como el empate en el Camp Nou. El Espanyol vuelve a estar en descenso dos años y medio después. No pudo ir peor la 16ª jornada. El Girona se llevó un punto del RCDE Stadium después de que el equipo perico remontara el 0-1. La victoria era más necesaria que nunca viendo el pleno de triunfo de los rivales de la zona baja.

El gol de Yangel Herrera amargó a los pericos. El Cádiz y el Celta ganaron fuera, mientras el Sevilla tomó aire en el Pizjuán. Conclusión: el bloque de Diego Martínez es penúltimo, con 14 puntos de 48 posibles. Este domingo visitará al Getafe de Quique Sánchez Flores, otro adversario destinado a pelear por la permanencia en una carrera repleta de obstáculos.

"Camino largo y duro"

"Debemos seguir compitiendo al máximo. Es la mejor manera de combatir las malas sensaciones. Yo creo en el equipo, sabíamos que el camino sería largo y duro", reflexionó Diego Martínez tras el último empate, enojado nuevamente por los errores individuales que sigue condenando a los pericos. El cuadro blanquiazul ha ocupado la zona media-baja de la tabla desde el inicio de Liga, pero nunca había caído en puestos de descenso hasta ahora.

El Espanyol es el equipo que más empates suma en la Liga (8), pero solo ha ganado dos partidos y encadena siete jornadas sin vencer

El año pasado, a estas alturas, el Espanyol era 11º con 20 puntos, seis más que ahora y ocho por encima de la zona de alarma que cerraba el Cádiz. Mucho peor iban las cosas en la temporada 2019-20, la del descenso, cuando el bloque catalán cerraba la clasificación con 9 puntos en la jornada 16. Por entonces, Pablo Machín ya había sustituido a David Gallego y le quedaba poca vida antes de la llegada de Abelardo.

El mercado invernal

El conjunto catalán ya estuvo al filo del pozo en la jornada 8, en la que concluyó el 17º, pero los temores no se acabaron de confirmar hasta este fin de semana con otro fiasco en casa, donde solo ha sumado 6 puntos de 24 posibles. El balance resulta especialmente doloroso teniendo el cuenta el excelente rendimiento de Joselu, segundo máximo goleador de la Liga y pichichi español con nueve tantos.

"Hemos tenido situaciones muy anómalas cuando hemos jugado como locales. Entendemos la frustración de la afición, pero el equipo da todo lo tiene", sostiene el técnico gallego, que se agarra al mercado de invierno como última vía para mejorar el nivel de plantilla. César Montes fue el primero en llegar y ahora se espera al menos un mediocentro y un extremo para cubrir parcelas que van muy justas de efectivos.

El equipo tiene tiempo de sobra para reaccionar y enderezar el rumbo de una temporada en la que le cuesta horrores sumar de tres en tres. El Espanyol, el equipo que más empates lleva de la Liga (8), solo ha logrado dos triunfos y encadena siete jornadas sin vencer. Así es complicado alzar el vuelo.