La sonrisa del Nàstic

Aunque el estado de ánimo de un club de fútbol suele depender del resultado del último fin de semana, hay iniciativas que proporcionan una felicidad mucho más estable y duradera. Acciones que van más allá de los goles para impactar de forma positiva en su entorno inmediato, colaborando a construir una sociedad mejor mediante lo que se conoce como Responsabilidad Social Corporativa. Una idea más asociada al mundo empresarial, que no obstante muchos equipos han asumido con naturalidad, incluso antes de que se definiera el propio concepto de RSC. El Gimnàstic de Tarragona es una buena prueba de ello.

El club siempre ha apostado por llevar a cabo este tipo de actividades de aspecto más social pero hay una de la que se sienten particularmente orgullosos, porque fueron decisivos en su puesta en marcha. Se trata del Nàstic Genuine, el equipo que participa en LaLiga Genuine Santander, un proyecto de LaLiga para deportistas con discapacidad intelectual que añade un ingrediente que no suele ser habitual en el fútbol profesional: sonrisas, muchas sonrisas. No es de extrañar que Josep Maria Andreu, presidente del Nàstic, asegure que se trata de su “máxima satisfacción”.

LaLiga Genuine, que se disputa en formato de fútbol 8 con equipos mixtos a partir de los 16 años, es una iniciativa pionera que no solo persigue objetivos deportivos, sino también de integración. En este sentido, su principal misión es la normalización de la práctica deportiva entre el colectivo de discapacitados intelectuales, así como promover la implicación del fútbol profesional en este proyecto integrador. Este último punto está prácticamente alcanzado, ya que quedan muy pocos clubs sin su equipo Genuine.

La segunda temporada se puso en marcha el fin de semana del 16 al 18 de noviembre en el Nou Estadi de Tarragona, y la ubicación no es casualidad. Porque, de hecho, fue la determinación del Nàstic la que permitió que este proyecto se convirtiera en realidad. “Teníamos toda una serie de chicos y chicas con discapacidad intelectual que venían a ver todos los partidos y pensamos que sería buena idea montar un equipo con ellos para que pudieran defender la camiseta no solo desde la grada. Al año siguiente, le presentamos al presidente de LaLiga, Javier Tebas, la idea de montar una competición y la aceptó de forma inmediata”, resume Andreu. Y mientras la FUNDACIÓN LaLiga se encargó de la organización, el Nàstic se convirtió en la sede fija del inicio en cada temporada.

En su estreno, el año pasado, la competición contó con 18 equipos. El éxito fue tal que esta temporada casi se ha doblado el número, ya que participan un total de 30. En Catalunya, además del Nàstic, se han apuntado Espanyol, Girona y Reus. Y se pueden encontrar nombres de clubes históricos como el Atlético de Madrid, el Athletic Club, el Sevilla o el Valencia. El formato de la competición se agrupa en cuatro fases, que se disputarán a lo largo del calendario en seis sedes. Además de Tarragona, este año acogen partidos Córdoba, La Coruña, Madrid, Los Ángeles de San Rafael (Segovia) y Valencia, que cerrará la campaña entre el 14 y el 16 de junio. La clasificación y los resultados se pueden seguir aquí.

El Nàstic Genuine entrena cada lunes por la tarde, con ejercicios ideados por su entrenador, Rafael Magrinyà, para mejorar en cuestiones físicas, técnicas y de concepto de juego. Aunque ganar no es lo único que importa sobre el terreno de juego, porque hay otras cosas mucho más importantes: el respeto, la alegría, el buen ambiente y el compañerismo entre todos los equipos. Y, sobre todo, no dejar nunca de sonreír. Razones hay para ello, también fuera del campo, porque jugadores como Cristian Sayago y Rubén Almazán trabajan a tiempo completo en las oficinas del club.

Esta no es la única iniciativa de responsabilidad social corporativa del Nàstic, que asume la gran visibilidad que tiene un club de fútbol como mecanismo para generar impactos positivos. “Debemos aprovechar esta proyección para ser solidarios y trasmitir esos valores que son tan necesarios en nuestra sociedad. Por eso, estamos siempre abiertos a colaborar con las asociaciones y entidades de nuestro entorno”, remarca José María Andreu Solé, responsable de RSC del club tarraconense.

Otra de las iniciativas más potentes del Nàstic nace, de hecho, de la mano del Nàstic Genuine. En los inicios del equipo colaboraban amigos, familiares y socios en una especie de voluntariado a pequeña escala. Algo que ha ido creciendo y ha acabado convirtiéndose en el Voluntariat Grana, un grupo de 300 voluntarios que de manera desinteresada apoyan las principales acciones de responsabilidad social corporativa del club, con la colaboración de la empresa BASF, patrocinador oficial del Nàstic Genuine. “Ya sabíamos que nuestra afición estaba involucrada, pero con el Voluntariat Grana quisimos dar un paso más y hacerles partícipes de todas nuestra acciones de RSC”, comenta Andreu Solé.

Ellos han sido fundamentales para la organización de la fase inicial de la LaLiga Genuine, así como de la Champions Genuine que se celebró el año pasado y que reunió en Tarragona a equipos como el Ajax de Ámsterdam o el Tottenham Hotspur londinense, además de Valencia, Villareal y Levante. Un torneo organizado por el Nàstic que tenía como objetivo romper no solo barreras, sino también fronteras. “Nos propusimos dar a conocer el proyecto en Europa y acogimos durante el fin de semana a diversos clubs internacionales, algo que nos hizo mucha ilusión. Para el Nàstic es un orgullo ser pionero de toda estas iniciativas Genuine”, remarca el responsable de RSC del club.

Jornada de formación del Voluntariat Grana del Gimnàstic de Tarragona.

Aparte, el Nàstic de Tarragona cuenta con otros proyectos sociales que reflejan su solidaridad e implicación con su entorno más inmediato y que suponen un importante retorno para la sociedad. Son los siguientes:

• En la línea de colaborar con entidades solidarias para darles visibilidad y recaudar fondos, la última acción del club ha sido la entrega de los ingresos de ‘ticketing’ del partido de LaLiga 1|2|3 entre el Nàstic y la AD Alcorcón del pasado 14 de octubre a la Asociación Provincial de Parálisis Cerebral de Tarragona - La Muntanyeta, que brinda apoyo integral a personas con parálisis cerebral. Además de donar los ingresos por la venta de localidades, se cedieron 500 entradas para que las gestionara la propia asociación y se instalaron mesas solidarias para que los socios también pudieran participar. Gracias a ello, La Muntanyeta sigue adelante con su proyecto de construir un nuevo equipamiento social.
• La recogida de tapones de plástico se ha convertido en una buena manera de recaudar fondos para alguna causa solidaria. Una acción que se puede ver en todo tipo de tiendas, oficinas y centros cívicos, pero cuando se implica un equipo de fútbol como el Nàstic su efectividad se multiplica. Por ejemplo, el club participa en el proyecto ‘Tapones para una nueva vida” de la Fundación Seur y en su primera edición consiguió recoger en el Nou Estadi hasta 240.000 tapones de plástico o dicho de otra forma, 60 toneladas, en colaboración también con BASF. Gracias a ello, se está haciendo posible que niños y niñas reciban tratamientos médicos que no están cubiertos por el sistema público. Como el caso de Laia, que está afectada por una meningoencefalitis que le afectó al sistema neuronal y que le hace necesitar atención personalizada las 24 horas. Ahora podrá asistir a un tratamiento único en España.

El presidente Josep Maria Andreu con la chaqueta de Voluntariat Grana.

• Muchas veces se habla de llevar los colores del club en la sangre, pero esa sangre también puede servir para salvar vidas. Por eso, el Gimnàstic de Tarragona fue el primer equipo profesional de Catalunya en participar activamente en una Maratón de Donación de Sangre. El pasado 15 de septiembre, con motivo de las fiestas de Santa Tecla, se volvió a celebrar este evento y se volvió a contar con la complicidad del club, que regaló una entrada para asistir al Nàstic – Deportivo a todos aquellos que donaron sangre
• Una de las enseñanzas que se extraen del mundo deporte es que el esfuerzo tiene recompensa. O que, como mínimo, sin él no se puede conseguir ningún objetivo. Por eso, el proyecto Junts Creixem tiene como fin colaborar con entidades, organismos y instituciones de Tarragona que trabajan para el desarrollo social y cultural y fomentan la cultura del esfuerzo y la superación. En cada partido que se juega en el Nou Estadi se invita a alguna de estas entidades. Po ejemplo, el pasado 8 de diciembre pudieron presenciar el encuentro entre el Nàstic y el Granada CF una veintena de jóvenes tutelados en el Servei de Primera Acollida i Atenció Integral Gaià, ubicado en Tamarit. El centro está orientado a menores no acompañados que hace pocos meses han llegado al territorio, para promover su autonomía personal y la igualdad de oportunidades.

Todos estos proyectos de responsabilidad social corporativa, con el equipo del Nàstic que participa en la LaLiga Genuine Santander a la cabeza, no tienen un retorno económico inmediato. Tampoco sirven para que la pelota acabe en el fondo de la red cada fin de semana. No suman puntos ni traen fichajes estelares. Pero tal y como concluye el presidente Andreu, aportan algo aún más importante: “Nos hacen a todos más felices”.