"Violencia vicaria: ¿Y si se lleva a mis hijos? Ya saldrá en las noticias"

Violencia vicaria. Hijos 'cosificados' como herramienta punzante para dañar al otro progenitor. Ya tenemos nombre, y ahora ¿qué? Ahora, juzgados colapsados; servicios sociales (o antisociales) amasando largas listas de espera; servicios de mediación, destinados, en teoría, a paliar el conflicto hasta la lejana fecha del juicio, completamente saturados; asistencia psicológica (otra gran olvidada) para nuestros hijos con escasos recursos... Este es el 'ahora qué'.

“No parecía violento”, “no había denuncias previas”... Obvio. No lo parecía, pero lo era (maltratadores sutiles y maquiavélicos), y no había denuncias porque el maltrato psicológico no deja marcas, no hay pruebas... Perfecto, ¡a esperar!

Parlamentos, discursos, manifestaciones, concentraciones, "no a la violencia de género", "no a la violencia vicaria"... Muy bien, señores, bla, bla, bla ¿y mientras? Mientras, como anunciaba Larra, "vuelva usted mañana". Y yo añado… ¿y si se lleva a mis hijos? Pues no hace falta que vuelva, ya saldrá en las noticias.