"Un club de barrio como la UE Horta debería dar igual cabida al esfuerzo como al talento"

Hace días, un padre denunció cómo la sección de baloncesto de la UE Horta descartaba a niños sin miramientos. Hoy quiero explicar que esto no es aislado: la misma falta de humanidad se repite en hockey patines.

En junio pasado, el día antes del último entrenamiento, nos comunicaron que nuestro hijo Marcel, de 9 años, no tendría plaza la temporada siguiente. ¿La razón? Subían niños de prebenjamín y "sobraba" un niño. Como Marcel era "el último en llegar sin hermanos", tenía que marcharse.

Pero aquí empiezan las mentiras. Al asistir al primer partido de la nueva temporada, descubrimos que habían incorporado a un jugador nuevo del Barberà. Mientras nos decían que no había plazas, ya tenían previsto fichar a alguien de fuera. La verdad era simple: querían un jugador "mejor" para subir el nivel del equipo.

Lo más doloroso no es la decisión deportiva, sino la cobardía de no decir la verdad. Si querían un equipo más competitivo, ¿por qué no lo dijeron? ¿Por qué mentir y destrozar la ilusión de un niño que eligió el hockey porque era el deporte que más le gustaba?

Este año se repite. Hace un mes, cinco familias más recibieron la misma noticia: no hay plaza para sus hijos en Alevines. Durante todo el año nadie les avisó, dejándolos con poco tiempo para buscar alternativas.

La UE Horta se presenta como "entidad con valores". Pero, ¿dónde están estos valores cuando se miente a las familias? Un club de barrio debería ser un espacio donde todos los niños tengan cabida, donde el esfuerzo valga tanto como el talento.

Aunque nuestro hijo ha seguido adelante, la herida permanece. Ver como mientras a él lo echaron por "falta de plazas", incorporaban a un jugador externo, es algo que no olvidará. Es hora de que la UE Horta reflexione sobre qué quiere ser: un club con valores o una fábrica de decepciones infantiles. Porque si continúan así, acabarán siendo conocidos no por su historia, sino por las lágrimas de los niños que han dejado por el camino.