Tranvía: "Ni es el momento ni es una prioridad"

Soy partidario de los nuevos aires politicos que han de renovar la tradicional política y, por tanto, mi reconocimiento a la actual alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. Pero no se puede hacer alquimia y volver a dividir a la opinión pública sobre un asunto ya votado en referéndum en la época del señor Hereu. Creo que ni es el momento de retomar esta idea, ni es un prioridad económica, ni es compartida por los usuarios del transporte público en Barcelona, ya que hay alternativas suficientes con paradas bien intercomunicadas y nuevas líneas de autobús que cubren dicho tramo.  

Soy usuario habitual de la moto, pero sensible al transporte público. Accedo por la Diagonal desde el Baix Llobregat, y acostumbra a estar colapsada desde Esplugues de Llobregat hasta la calle de Numància. Luego, hasta la plaza de Francesc Macià mejora, y desde ahí hasta paseo de Gràcia vuelve a estar colapsada.  Es evidente, que la conexión del TRAMV reduciría el tránsito de vehículos de una arteria principal ya mermada.  Además, creará una barrera virtual entre el lado montaña y mar de la Diagonal con afectación peatonal y de los comercios de la zona.

Si el principal objetivo de la unión del TRAMV son motivos medioambientales y dar prioridad al peatón, se podría contemplar la posibilidad de ahorrarse la inversión prevista, respetar la opinión del pueblo y limitar el vehículo en dicho tramo.  Evitemos nuevas actuaciones municipales de atasco como el generado por la reciente remodelación de la calle de Londres esquina con Comte d'Urgell, que ya ha sido publicado en la sección de cartas del lector y que, según el ayuntamiento, se está estudiando su impacto ahora, a posteriori.

Seamos con nuestras decisiones políticas sensatos, honestos, eficientes y sostenibles, por favor, señora alcaldesa.