"Salud y educación. Nuestros hijos tienen derecho a las dos cosas"

El modelo de la 'vuelta al cole' en Catalunya se ha basado en la importancia de la educación presencial para asegurar la igualdad en la educación. Dado que no todos los niños pueden acceder con la misma facilidad a la educación virtual, se volverá a las aulas físicas. En Catalunya se ha optado por un modelo de colegio en que no habrá reducción de ratios, ni distancia de seguridad o uso de mascarilla dentro de los grupos de las clases (los llamados 'grupos estables de convivencia'). Es una decisión que asegura el acceso de todos los menores a la educación en las mismas condiciones. Pero la salud también es un derecho fundamental. El pasado 16 de agosto, el secretario general de Salut Pública de la Generalitat, Josep Maria Argimon, sobre el tamaño del grupo estable:  "Si este grupo puede ser pequeño, que sea lo más pequeño posible". No obstante, ha recordado que dependerá de la capacidad de cada centro, y que en algunos casos no será posible por problemas logísticos y organizativos.

Si la Generalitat aborda de esta manera el retorno a las aulas, los niños que tienen la suerte de asistir a una escuela con más recursos (humanos, de espacio...) disfrutarán de una vuelta al cole más segura que los niños de otros centros, tanto porque la reducción de grupos lleva a la disminución del número de contactos de cada niño (y por tanto de posibles fuentes de contagio) como porque los centros que pueden desdoblar los grupos posiblemente podrán, además, espaciar a los niños respetando la distancia de seguridad.

No podemos potenciar la educación a costa de la salud. Nuestros hijos tienen derecho a las dos cosas. Igual que no podemos aceptar que unos accedan con facilidad a aulas virtuales y otros no. No podemos aceptar que unos estén en aulas seguras y otros no. Es imprescindible que la Generalitat siga trabajando hasta que consiga un modelo que garantice la igualdad en educación y en salud para todos los alumnos y sus familias.