"Los nacionalismos no llevan a un futuro mejor ni más humano"

Leyendo un artículo de opinión relacionado con las manifestaciones de Barcelona me ha dado por pensar que la vida, vista como un fin, es realmente desalentadora. En este sentido, creo que los ideales ayudan a dar sentido y un aura de trascendencia que racionalmente es difícil de encontrar. 

Hay gente brillante, excepcional, con talento, con dones o tenacidad que pueden ser capaces, o lo han sido, de transformar el mundo en todos los ámbitos: culturales, humanísticos, sociales, científicos,  médicos, económicos... (no todos necesariamente para bien). Personas cuya imprenta en la historia le ha llevado o llevará a la inmortalidad y a inspirar a otras personas. Pero son los menos.

Creo que el ansia de trascendencia vital en la mayoría de los mortales está en sobrepasarse a si mismos y a sus propias existencias. Por ejemplo, el hecho altruista (cuando lo es) de tener hijos da sentido a una existencia que lleva a otra. Está la gente que mediante la fe quiere creer que esto no se acaba. Personas que se involucran en oenegés y fines sociales que pueden dar sentido a una vida ayudando a otras. Gente que se vuelca en su trabajo porque encuentran que les llena el tiempo y la mente sacrificándose por una entidad o ente. O incluso algunos afortunados que sienten una vocación hacia lo que hacen. También gente que ama sin condición y otros pragmáticos que buscan adrenalina que les haga sentir que existen. Ideales con aspiraciones colectivas o individuales que dan aire.

Y en esa línea creo que están los que tienen un gran sentido nacional y que desde una supuesta lucha y victimismo adquieren un ansia de trascendencia con foco en mejorar el mundo de los que están a su alrededor. Ideales o ideas que mueven vidas. 

Pero desde mi punto de vista, hay un matiz inquietante en estos últimos, y es que esa trascendencia basada en algo colectivo está fundamentada en la diferenciación. Y creo que ese matiz es paradójico y no lleva a un  futuro mejor ni más humano. Quiero pensar que esa épica complementa algo y da un sentido a vidas rutinarias y comunes.