La felicidad de una mujer tiene muchas caras

Una trabajadora de un centro de atención telefónica. / Danny Caminal (El Periódico)

Odio ese concepto que dice que "el mayor logro y felicidad de una mujer es cuando se convierte en madre". No lo tolero. ¿Acaso nadie tiene en cuenta el esfuerzo que conlleva sacar los estudios adelante o quizá lo difícil que es buscarse un espacio en el mundo laboral, y más ahora con lo difícil que está todo económicamente? ¿Por qué ser mamá tiene que ser tan importante en la vida de una mujer? Con esto no quiero decir que ser madre no tenga sus méritos. Es increíble cómo una persona puede concebir dentro suyo una nueva vida, e incluso la forma en la que lo trae al mundo es admirable. Pero ¿qué pasa con aquellas mujeres que no tienen en sus planes tener un hijo y prefieren dedicarle tiempo a sus carreras profesionales, a sus negocios o a sus vidas en pareja? ¿Acaso ellas nunca sabrán lo que es la felicidad? ¿Acaso nunca se sentirán orgullosas de ellas mismas y de todo lo que han logrado?