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Mi indignación por el abandono de nuestros mayores

Una mujer mayor sujeta su monedero mientras saca dinero de un cajero en Barcelona.

Una mujer mayor sujeta su monedero mientras saca dinero de un cajero en Barcelona. / FERRAN NADEU

Hace ya tiempo que observo cómo nuestros mayores se han ido quedando muy atrás en esta nueva era de nuevas tecnologías, redes sociales y comunicación, pero creo que ya está llegando a un momento extremo y preocupante, las grandes compañías, plataformas, bancos y demás multinacionales y empresas no cuentan con ellos ni los tienen en cuenta, ya que si no tienes un mail, un teléfono móvil con 'app' de distintas compañías con diversas claves es como si no existieran...

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Lo peor es cuando pasamos a negarles el trato humano, el cara a cara, el hablar con alguien y no con una máquina, empezaron con los bancos, después de haber sido estafados con las preferentes y otras similares deciden prescindir de las ventanillas y, viéndose obligados a usar los cajeros de la manera que pueden, se les negó así el trato humano.

Mi indignación total ha llegado este fin de semana, cuando una pareja de más de 80 años que viven en mi escalera llevan desde el viernes por la mañana sin linea telefónica y en consecuencia sin el servicio de teleasistencia. Al darse cuenta de ello, por el aviso del aparato de teleasistencia, bajan a los Mossos a preguntar qué pueden hacer. Estos los envían a una tienda Movistar, el hombre va hasta plaza Cataluña con las facturas y demás comprobantes, con los nervios pierde la factura en el trayecto, llega allí, explica la situación y le dicen que tiene que llamar al 1002. ¿Pero cómo, si no tiene teléfono? No obstante le dicen que toman nota, se vuelve a casa y consigue que una vecina llame al 1002, viene un técnico el viernes a las cuatro de la tarde, les dice que su instalación está bien, que es una avería exterior y que pasa la nota a la compañía.

El sábado por la mañana me llama a mí y me explica el caso, intento llamar sin poder contactar con ningún agente, tan solo puedo hablar con máquinas. Si a mí ya me resulta difícil y estresante, para ellos era incompresible. Termino llamando a teleasistencia y me dicen que ellos no pueden hacer nada, que eso es cosa de las grandes compañías como Telefónica, que si les molesta la alarma del aparato que no deja de sonar que lo desenchufen y que prueben a ir a una tienda Movistar a ver si consiguen algo. Indignante.

Al final, con la otra vecina conseguimos contactar con un agente, el cual muy amablemente nos vuelve a decir que ya les consta la avería y que están trabajando en ello, les volvemos a pedir por favor que lo agilicen todo lo que puedan, que son dos personas mayores solas y dependientes de un teleasistencia que no funciona sin linea telefónica. Nos invita a contactar con Movistar por Facebook a ver si tenemos más suerte. Llevo desde ayer con 'mensajitos' y solo obtengo respuestas de disculpen las molestias, estamos trabajando en ello. Estamos a domingo nueve de la noche y siguen sin linea.

El abandono de nuestros mayores es indignante. Les negamos el trato humano y los colmamos de tecnologías que no entienden ni les sirven para nada. ¿Qué tipo de sociedad estamos construyendo?

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