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"Huelga de Renfe: Suplicio adicional al que ya aguantamos diariamente"

La estación de Sants, en la segunda jornada de huelga de maquinistas de Renfe. / MANU MITRU / VÍDEO: EFE

A la ya precaria infraestructura del servicio: trenes sucios, viejos, incómodos, abarrotados de gente, malolientes, con servicios de seguridad en mínimos e impuntuales, se suma la huelga (además, con el incumplimiento de los servicios mínimos), como si no aguantáramos ya suficiente los ciudadanos en el día a día de este 'servicio' tan deficiente.

Un despropósito sumado a todo lo anterior, no porque no puedan hacer uso del derecho de huelga, sino porque al ya precario servicio que recibimos cada día por parte de Renfe se une la dificultad de transporte para los usuarios que no tienen coche o que no tenemos los medios económicos para desplazarnos en vehículo privado por el alto coste que supone hacer 150 km (ida y vuelta) para desplazarnos al trabajo durante los 15 días que dura la huelga.

Un gasto más al que hacer frente sumado al aumento de la factura de la luz y, por extensión, al aumento de la alimentación y de los servicios. De todo en general, mientras los salarios siguen estancados. Cada vez es más difícil hacer frente a los gastos, que se incrementan constantemente con el mismo presupuesto salarial.

La verdad es que uno ya está más que harto de Renfe y de la pasividad de los gobiernos de turno (no importa el color) porque, a pesar de tantas promesas de cambio, la verdad es que el servicio sigue igual de desastroso que siempre, igual que los salarios y los servicios básicos. No han mejorado en nada desde hace muchos a años, Renfe incluida.

A veces uno se pregunta hasta cuándo vamos a seguir aguantando los ciudadanos tantas tropelías sin tomar acciones para que se nos escuche de verdad.

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