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"El covid nos ha enseñado que el deporte es mucho más que competir"

Unos chicos entrenan en el complejo deportivo Fort Pienc, este lunes. 

Unos chicos entrenan en el complejo deportivo Fort Pienc, este lunes.  / MANU MITRU

Hace unos días, volviendo del trabajo, pasé por un campo de fútbol y vi a dos padres encaramados a un muro alto, animando a sus hijos y grabando con el móvil el entrenamiento. Me parecieron dos marcianos, y explicaré el porqué. Soy el padre de Berta, una niña de 9 años que juega a fútbol sala por diversión. Son 12 jugadoras que disfrutan dos horas por semana en una pista de cemento al aire libre. Tienen campo, porterías y a Cristina, su entrenadora. Salen emocionadísimas explicando detalles de pases, jugadas, caños y de goles.

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Hasta aquí el relato podría ser el de cualquier equipo. La diferencia está en que ellas no están federadas, no compiten y tienen el fin de semana libre. La idea surgió de un grupo de padres que veíamos irrelevante que nuestras hijas compitiesen. En su club, el Molins99, lo entendieron perfectamente y aceptaron el reto. El curso pasado éramos una extrañeza, un grupo de niñas que iban a jugar al fútbol sin otro objetivo que pasar un rato divertido. Sin embargo, este año la pandemia lo ha cambiado todo y muchos equipos se tienen que conformar con nuestro modelo: entrenar sin competir. Estos días escucho a padres indignados por no poder ver los los partidos de sus hijos porque las instalaciones deportivas están cerradas. Es entonces cuando la desesperación da paso a las escenas de padres subidos a verjas y farolas, madres escudriñando entre ángulos imposibles, entrenadores grabando el partido y compartiéndolo en vivo por redes sociales...

Todo esto me reafirma en que el deporte es mucho más que esa hiperpresencia. Seguro que muchos niños disfrutan más en los entrenamientos sin sus padres observándolos o haciendo comentarios desde la grada. O que los árbitros viven el deporte de forma más relajada. Si algo bueno ha traído esta pandemia ha sido plantearse la esencia de casi todo. El deporte es igualdad, respeto, compañerismo, ejercicio físico y salud. No vayamos a estropear esto último cayéndonos de un muro y rompiéndonos la crisma.

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