Contenido de usuario Este contenido ha sido redactado por un usuario de El Periódico y revisado, antes de publicarse, por la redacción de El Periódico.

¿Dónde está la Iglesia?

Una misa en la basílica romana de San Pablo Extramuro.

Una misa en la basílica romana de San Pablo Extramuro. / MAURIZIO BRAMBATTI (EPA/ANSA)

En estos tiempos extraordinarios en que la humanidad está en jaque, sale a relucir lo mejor del ser humano. Médicos, enfermeros y auxiliares, trabajadores sociales, cuidadores, Policía y Guardia Civil, Protección civil... En definitiva, aquellas personas que ejercen acciones humanitarias están siendo ejemplares y poniendo de manifiesto, más si cabe, la crucial labor que desempeñan en la sociedad.

Entretodos

Y en este conjunto de gremios con labor humanitaria (cuyo listado completo no cito para no extenderme) echo de menos a la Iglesia. Se supone que la religión católica, representada por la Iglesia, tiene como uno de sus objetivos principales tender la mano a los más necesitados, ofrecer cobijo y amparo, ayudar en tiempos difíciles.

Bien, pues estamos en uno de esos tiempos difíciles en los que toda ayuda es poca. Y echo en falta esa función humanitaria que la Iglesia dice tener. Echo en falta que la Iglesia, además de recomendar rezar, ofrecer consejos sobre cómo seguir las misas virtuales y remitir a la fe en Dios, dé un paso al frente y comience a ofrecer ayuda tangible. ¿Podrían las instituciones eclesiásticas ofrecer cobijo y amparo en estos tiempos difíciles a las personas sin hogar? ¿Podrían ofrecer alguna de sus instalaciones para improvisar algún centro médico de campaña? ¿Podría la Iglesia realizar una donación generosa y ejemplar para contribuir de alguna forma en el gasto médico que se está llevando a cabo? ¿Podría emplear parte de esos 11.000 millones que recibe del Estado cada año en tender la mano a los más necesitados en esta crisis?

La Iglesia tiene una oportunidad única para ensalzar su figura y poner de manifiesto que tiene una función humanitaria en la sociedad. Una oportunidad para hacer entender a los más escépticos cuál es la razón humanitaria de su existencia. Una oportunidad para predicar con el ejemplo y poner en práctica el mensaje que transmite a sus feligreses. Iglesia, es tu turno.

Participaciones de loslectores

Másdebates