Ciclistas: más formación vial por menos víctimas de tráfico

En nuestras carreteras y ciudades los atropellamientos a ciclistas son una realidad inasumible e inaceptable. En muchos casos el siniestro tiene como causa explicativa la presencia de alcohol u otras drogas, pero en la mayoría el problema se presenta cuando no se mantiene la distancia prudencial reglamentaria de separación lateral para adelantar a este tipo de vehículos, sobre todo cuando el adelantamiento se realiza entre el ciclista/s y una línea contínua.

La cotidianidad nos demuestra que son muchas las personas que conducen sin saber que actualmente el Reglamento General de Circulación permite adelantar a bicicletas atravesando la línea continua, e invadiendo el sentido contrario, siempre que las condiciones de visibilidad y seguridad lo permitan.

Este desconocimiento provoca que, en algunas circunstancias, se priorice el no mantener la distancia lateral de seguridad y llevarse por delante a un ciclista (o peor aun a varios) por no pisar la línea continua. La ignorancia suele ser peligrosa y más cuando se juega con la vida propia o ajena.

¿Para cuándo será obligatorio el reciclaje periódico sobre la actualización de conocimientos de todos los conductores? ¿Cuántas personas más han de morir para aceptar que el 90% de los siniestros de tráfico tienen como causa el factor humano y que el remedio fundamental está en la formación?