Los 5 pasos para trasplantar una planta

El proceso es delicado, porque son seres vivos que no toleran bien los cambios. Las raíces suelen ser frágiles y no es bueno tocarlas demasiado. Pero si es imprescindible, sigue estas pautas para hacer el trasplante lo mejor posible.

PASO 1

Busca la maceta adecuada

Asegúrate de que la nueva maceta sea más ancha y también más profunda para que las raíces tengan sitio para crecer.

PASO 2

Elige el mejor momento

Hay que trasplantar antes de la fase de crecimiento (parada vegetativa), nunca durante floración o fructificación. Y mejor a primera hora de la mañana, para que la planta tenga tiempo de adaptarse.

PASO 3

Prepara el drenaje

Prepara la base con una capa de drenaje para que salga el exceso de agua, preferiblemente con piedra en el fondo de la maceta y un agujero en el tiesto.

PASO 4

Extrae la planta con cuidado

Toma la planta desde el tallo principal para poder hacer presión y sacarla de la maceta anterior. Desenrolla sus raíces con cuidado si hace falta.

PASO 5

Colócala en la nueva maceta

Comprueba que al meter la planta en la nueva maceta está centrada y vertical. Rellena con tierra. No conviene presionar mucho.

Tras el trasplante, es conveniente regar la planta para que se asiente y, en caso necesario, rellenar con más tierra. Además, es muy importante vigilarla durante unos días, para ver cómo reacciona y cómo responde a su nuevo ambiente, puesto que, al ser un ser vivo, se estresa con los cambios.

Apúntate al Club Entender+ Animales y plantas de EL PERIÓDICO