Entrevista

Ricardo Martínez Llorca: "La soja es el tipo de explotación que agota los recursos de la Tierra"

El escritor salmantino acaba de publicar ‘El viento y la semilla’ (Editorial Comba), un extenso reportaje donde recoge el viaje que hizo en 2008 a la inquietante frontera agrícola de la soja en Argentina. La obra retrata el sinsentido inherente a estas descomunales explotaciones que expulsan a los campesinos, aceleran la deforestación y agotan la tierra con el fin de alimentar no hombres, sino ganado.

El escritor Ricardo Martínez Llorca.

El escritor Ricardo Martínez Llorca.

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Mauricio Bernal
Mauricio Bernal

Periodista

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-Dígame, ¿cuáles diría que son las peores consecuencias de la colonización sojera?

-Yo diría que lo que más me afectó fueron las villas miseria, los cinturones de pobreza donde acaba la gente. Hablamos de gente expulsada del campo que tenía que ir, recoger plásticos por la calle, poner unas estacas, montarse una cabañita y de ahí en adelante dormir dentro de esos tres metros cuadrados.

-¿Cómo concretamente expulsa a los campesinos la ampliación de la frontera sojera?

-Mire, el campesinado tradicional se ve expulsado porque donde antes necesitabas a lo mejor 100 personas para trabajar una extensión de tierra con una serie de cultivos rotatorios, con cultivos variados y demás, en cuanto pones la gran explotación sojera necesitas ocho. Eso significa noventa y tantas personas que se quedan sin recursos para subsistir, de las que muchas van a las ciudades, con una mano delante y otra detrás, a vivir en los cinturones de pobreza.

"Lo que más me afectó fueron las villas miseria, los cinturones de pobreza donde acaban los campesinos expulsados del campo"

-¿Es muy reduccionista decir que la soja enriquece a unos pocos y empobrece a la gran mayoría?

-No, para nada, eso es de hecho lo que han denunciado todos los que han trabajado allí, los activistas ecológicos, los activistas por los derechos humanos... Todos dicen lo mismo. Pero, en fin, ocurre con la soja y ocurre con muchas otras cosas. La soja representa algo que está sucediendo en todo el mundo con otros cultivos y con otras explotaciones en general, no solo cultivos.

-Se refiere a las macroexplotaciones de todo tipo, ¿no?

-Sí, hablo de esa tendencia a destinar grandes extensiones a la explotación de una sola cosa, de un solo producto, grandes explotaciones agrícolas o grandes explotaciones marítimas, y todo como si fuera una explotación minera: entras, ves una veta y tiras de todo lo que hay ahí dentro hasta agotarla. Sucede en el mar, con la pesca, y en el tema del cultivo es un poco distinto, pero no tanto, porque lo que hacen es eliminar todas las sustancias que nutren la tierra y dejan terrenos raquíticos, sin nutrientes, terrenos donde no va a crecer nada. Es el tipo de explotación que está agotando los recursos de la Tierra.

"Lo que hacen es eliminar todas las sustancias que nutren la tierra y dejan terrenos raquíticos, sin nutrientes, terrenos donde no va a crecer nada"

-En el libro cuenta que una parte de la colonización sojera se ha llevado a cabo con violencia, despojando de la tierra a los campesinos.

-En parte, sí. De todas maneras, gente que estaba allí me decía que hay gente muy legal y muy elegante haciendo esto, que compran las tierras, probablemente a precios justos. Pero no siempre sucede. La violencia ha ocurrido con frecuencia.

-En cualquier caso, ha habido una resistencia organizada, ¿no?

-Yo diría que ha habido pequeñas resistencias, varios actores que trabajan sobre el terreno, y un debate interno muy intenso sobre cómo enfrentar la situación, si con herramientas jurídicas, con herramientas políticas o incluso con violencia.

"Ha habido un debate interno muy intenso sobre cómo enfrentar la situación, si con herramientas jurídicas, con herramientas políticas o incluso con violencia"

-Causa desasosiego leer las partes en las que habla de la plaga de langostas que llegó con los cultivos de soja. Pero es que, al fin y al cabo, queda la impresión de que la soja también es como una plaga.

-Sí, yo recuerdo cuando pregunté, ¿estas langostas no se pueden comer? Igual que se comen los saltamontes en México, por ejemplo, y me dicen: no, es que mira, es que se alimentan de quebracho, y son muy amargas y no hay quien las coma. De todas maneras, si me exprime un poco, la plaga no es tanto la soja como la ganadería, porque casi todo ese cultivo de soja es para alimentar ganado. El afán que tenemos de comer carne es lo que empuja el crecimiento de la producción de soja.

-Ganado europeo, sobre todo, ¿no? En el libro dice que España es el cuarto importador mundial de soja, y que la destina para alimentar cerdos.

-Sí, cerdos de macrogranjas. Para conseguir mil calorías de comida de esos cerdos, los animales tienen que haber consumido por lo menos 10.000 calorías de pienso de soja. Lo que da rabia es que se necesita 10 veces menos territorio para producir la misma cantidad de alimento para alimentar a las personas.

"El afán que tenemos de comer carne es lo que empuja el crecimiento de la producción de soja"

-Estuve viendo un mapa de Greenpeace, justamente, que muestra que el objetivo de las grandes explotaciones agrícolas no es alimentar personas, como aún debe creer mucha gente.

-Sí, casi toda la comida que consumimos, la comida de origen vegetal, viene del campesinado tradicional, cuando resulta que son una parte muy pequeña de la tierra dedicada al cultivo. Da mucha rabia, porque así se acaba con una forma de vida que entiende el paso del tiempo de otra manera, que entiende las estaciones de otra manera, que establece una relación de respeto con la naturaleza. Ocurre con la soja y con la palma de aceite, por ejemplo.

-¿Es esto una nueva forma de colonialismo operado a través de empresas alimentarias?

-Lo de nuevo no lo sé, yo creo que es el mismo de siempre pero subido de volumen, y operado a través de empresas que no se juegan nada. Son empresas que están vete tú a saber dónde, empresas que compran los cultivos pero no trabajan la tierra, porque donde trabajan es en el mercado financiero. Compran ‘stock options’ y especulan con ellas. Si sale bien, ganan mucho dinero, y si sale mal, lo pierden los sojeros y los trabajadores.

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-Capitalismo.

-Es lo que a mí me interesaba del tema. Yo escogí un ejemplo concreto, el de la soja, pero es que así es como funciona el planeta. El capitalismo global es así.