La Garrotxa aplica en Semana Santa medidas para evitar masificación en pozas

El Consorcio de la Alta Garrotxa aplicará a partir de Semana Santa un paquete de medidas para reducir la presencia de vehículos motorizados en espacios naturales e incrementar la seguridad en la zona, en especial en el entorno de las pozas.

El Consorcio de la Alta Garrotxa y los municipios de Sales de Llierca, Montagut i Oix y Tortellá iniciarán esta Semana Santa las primeras acciones en el espacio de Sadernes y Sant Aniol de Aguja, en el corazón del Espacio Natural Protegido de la Alta Garrotxa, para evitar los problemas derivados del exceso de vehículos, en aumento en los últimos años.

En los días festivos de Semana Santa se desplegará en el territorio un servicio de información y vigilancia, y se reforzará la señalización. 

Sólo se podrá aparcar en lugares habilitados expresamente para este uso con el objetivo de compatibilizar la conservación de este espacio natural y la convivencia ciudadana.

Esta es una medida destinada sobre todo a garantizar la seguridad y el orden público, ya que la masificación de coches del verano pasado generó graves problemas de circulación y acceso a los servicios de emergencia, como ambulancias o bomberos, y puso en peligro la conservación del espacio natural y la convivencia con los municipios afectados.

El Espacio Natural Protegido de la Alta Garrotxa dispone actualmente de una única zona de aparcamiento para acceder al sector de las pozas de Sadernes y Sant Aniol de Aguja, ubicados precisamente en el núcleo de Sadernes.

Además, es precisamente a la altura de este único aparcamiento donde empieza la regulación del acceso motorizado al espacio natural, lo que imposibilita el acceso y el estacionamiento más allá.

El aparcamiento en otros espacios que no sean los habilitados o el incumplimiento de la regulación del acceso motorizado comportarán sanciones por parte de Mossos y del cuerpo de Agentes Rurales, así como de los guardas rurales del Consorcio.

Descongestión de los espacios masificados

Esta medida permitirá descongestionar los puntos masificados, mejorar la acogida del visitante y el respeto al medio natural y garantizar un marco de convivencia con los vecinos de la zona.

Además, el Consorcio contará con un servicio de información para atender al visitante y hacer una acogida correcta del usuario.

Estas medidas arrancan de un estudio más amplio e inconcluso que realizan de forma conjunta el Consorcio, SIGMA, Diputación y Fundación Emys para detectar las presiones y las necesidades derivadas de la alta frecuenta en las zonas de baño y proponer medidas de gestión para racionalizar el acceso.

Este estudio se focaliza en el espacio de Sadernes y Sant Aniol de Aguja como prueba piloto para la creación de un modelo de gestión de uso público sostenible que se pueda replicar en otros municipios con la voluntad de encontrar el equilibrio entre la conservación del espacio y su uso recreativo.

La problemática de la alta frecuencia en espacios naturales de Cataluña, según el consorcio, requiere de soluciones para evitar la masificación, sobre todo en pozas y ríos, donde se ha visto un aumento de visitas en los últimos años, pero sobre todo una vez finalizados los confinamientos de la COVID-19.

Por este motivo, el estudio va más allá de la gestión de aparcamientos y calculará la capacidad de carga de cada espacio para proponer medidas de gestión.