Propuestas en espacios cerrados

Cinco refugios climáticos para huir del calor en Barcelona

Más allá de buscar la sombra en un parque o quedarse en casa con el aire acondicionado, hay otras formas de refrescarse en la ciudad

Gente sentada en los bancos del centro comercial Glòries

Gente sentada en los bancos del centro comercial Glòries / periodico

Carol Álvarez

Carol Álvarez

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Barcelona donde no se suda existe, por mucha ola de calor que asome en forma de tsunami en el espacio meteorológico de los informativos. El calentamiento global hace décadas que da avisos, y gobernantes de todo el mundo se han movilizado en mayor o menor medida con el fin de que no nos derritamos. La estrategia pasa en el caso de Barcelona por habilitar refugios climáticos, en despliegue de recomendaciones compartidas por otras administraciones.

Ya en la época del primer tripartito en la Generalitat la consellera de Salut Marina Geli proponía combatir el calor estival pasando el rato en el supermercado y los cines, medidas que sumaba a las de hidratación y rehuir el sol a las horas centrales del día. La propuesta sonaba a algo excéntrica entonces, y muy consumista.

Lo cierto es que la idea de desplegar una red de refugios climáticos distribuida por los distintos barrios de las ciudades tiene proyectos concretos, y tanto la Diputación de Barcelona como el Ayuntamiento trabajan en habilitar cada vez más espacios públicos para darles este otro sentido. Los centros escolares, por ejemplo, trabajan en esta nueva funcionalidad veraniega, como antes lo hicieron cuando se prestaron a la iniciativa de abrir sus patios a los vecinos que pasan el verano en la ciudad. 

La ventaja de los refugios climáticos también se extiende al invierno. Aunque aquí son menos frecuentes las olas de frío, los espacios ofrecen el mismo acondicionamiento para los usuarios y son muy utilizados estos modelos de servicio en ciudades nórdicas como Helsinki o en la fría Hamburgo, en Alemania.

Este verano, además de buscar la sombra en un buen parque urbano, puedes recurrir en Barcelona a una selección de refugios climáticos para poner a raya el bochorno.

La biblioteca pública Zona Nord

La biblioteca pública Zona Nord, en Ciutat Meridiana (Carrer Vallcivera, 3 ), es una de las que abre puertas en verano en el marco del proyecto municipal de mantener equipamientos acondicionados en cada barrio para mejorar el bienestar de los barceloneses. Un solo vistazo a su foto en la web anima a coger el transporte público y hacerle una visita. Diseñada por el arquitecto Rafael Perera en 2009, presenta un tejado cubierto de vegetación y es muy espaciosa. Con el covid-19 las medidas de acceso y disponibilidad de libros y revistas han cambiado, pero la oferta sigue siendo muy amplia.

Incluso puede uno visitar Barcelona a través de la importante colección de guías y libros de referencia sobre el barrio y la ciudad que conserva.

Horarios de verano: De lunes a miércoles de 14,30 a 19,30/ Jueves y viernes de 9,30 a 14 horas)

La biblioteca pública El Clot-Josep Benet

Si uno prefiere moverse por Sant Martí, la biblioteca El Clot-Josep Benet da servicio en otro marco arquitectónico incomparable, el edificio Disseny Hub Barcelona, en la plaza de las Glòries, obra de Josep Martorell, Oriol Bohigas y David Mackay . El acceso al recinto,  través de unas largas escaleras mecánicas y su emplazamiento, junto a un estanque artificial, merecen un paseo y un buen rato con visita incluida, si queremos, a la exposición del momento programada por el Museu del Disseny, dedicada a los azulejos. 

Horarios de verano: De lunes a miércoles, de 14,30 a 19,30 horas/ Jueves y viernes, de 9,30 a 14 horas

Centros comerciales

 El centro comercial Glòries está en constante renovación. Tras su reforma en 2017 de la mano de Javier Mariscal, ha ido variando su oferta de tiendas y junto a tiendas que llevan desde la inauguración como Sephora, Fnac, H&M o Zara, se han sumado Uniqlo, Hollister o Munich a los bares, restaurantes. El hipermercado da para una visita acondicionada, con su área de muebles de terraza y jardinería donde más de uno para un rato para probar el sofá al fresco. La superficie subterránea ofrece especialmente remansos de paz, con bancos para sentarse y plantas frondosas que aunque parecen aromáticas no lo son: la tienda Rituals hace su aportación perfumada al ecosistema ambiental del centro. 

Horarios: de 9,30 a 22 horas

En los dos extremos de la avenida Diagonal,  los centros comerciales Illa Diagonal y Diagonal Mar abren también puertas todo el día, aunque es el centro ubicado en el Fòrum es el que ofrece más espacios pensados para el reposo (sin gasto) del visitante. El eje se puede recorrer en el autobús 7 sin sufrir mucho los rigores del calor.

Horario Illa Diagonal: de 9,30 a 21,30 horas/ Horario Diagonal Mar: de 9,30 a 22 horas

Suscríbete para seguir leyendo