“Competimos con las grandes ingenierías de alcance mundial”

-IDP nace como un proyecto de cuatro jóvenes recién titulados en ingeniería y en apenas 20 años se ha convertido en una compañía con obras en más de 50 países. ¿Cuáles han sido las claves de esta rápida evolución?

-El punto de inflexión se produce en el 2011, en plena crisis, cuando desarrollamos un plan estratégico basado en cuatro ejes que nos han permitido crecer y evolucionar hasta convertirnos en una firma capaz de competir con las grandes ingenierías internacionales. El elemento fundamental de ese plan fue la apuesta por usar la tecnología BIM (Building Information Modeling) en un momento en que todo el mundo utilizaba CAD. Vimos que tenía un potencial enorme para convertirse en la herramienta del futuro en el campo de la construcción y en la elaboración de proyectos de infraestructuras y edificios. El tiempo ha demostrado que la decisión fue acertada, puesto que pasamos de una facturación de 2 millones de euros en 2011 a superar los 11 en 2020.

En IDP también optamos por la diversificación, que nos ha llevado a estar presentes en diversos sectores; la innovación y la digitalización; y la internacionalización, con presencia directa y estable en varios países latinoamericanos y a realizar proyectos de diversa índole y dimensión.

-¿Qué premisas básicas marcan la ingeniería actual?

-Si hablamos del sector privado, que es más del 85% de nuestro negocio, en primer lugar están la solvencia profesional, el conocimiento y la experiencia en la tipología de los proyectos que el cliente quiere desarrollar. En segundo, que estos sean realizados mediante tecnología BIM con objeto de asegurar una eficiencia y, en tercer término, el presupuesto. Nuestros clientes valoran la excelencia en la ingeniería y saben que invertir en ella conlleva ahorros muy grandes en ejecución, que es donde está el gran coste de la inversión.

Si hablamos del sector público, se invierten los términos: los honorarios son los que mandan, conllevando proyectos inexactos que provocan desviaciones en costes y plazos grandes. Confío que con la obligación del uso del BIM que nos impone la Unión Europea seamos capaces de corregir esta situación como ya acontece en los grandes países que son referentes de modernidad.

-¿Y para la internacionalización? ¿Cómo han logrado expandirse a tantos lugares?

-Nuestra estrategia se sustentaba en tres líneas, comenzando por una presencia física directa en países atractivos de Latinoamérica. Actualmente tenemos oficinas en Lima y Santiago de Chile. Una segunda línea era ir a buscar la competencia con las grandes ingenierías mundiales, y ello se aterriza con licitaciones internacionales financiadas por Organizaciones Multilaterales con sede en Washington o Nueva York, y que nos han generado más de 20 contratos en países como Brasil, Méjico, Perú, Bolivia, Nicaragua, Colombia, Ecuador, Guyana, Trinidad y Tobago, etcétera.

Y una tercera línea era acompañar a nuestros clientes, grandes multinacionales, en sus inversiones por el mundo. La ingeniería BIM es muy preciada por nuestros clientes y se deslocaliza bien, lo que nos ha permitido trabajar en 21 pases de Europa, en Marruecos, Argelia, Costa de Marfil y Níger de África, y en China, India, Tailandia, Indonesia y Qatar.

-¿Con qué apoyos han contado para esta expansión?

-Cuando aterrizas en un país, bien sea para implantarte bien sea para realizar un proyecto, tener la oportunidad de contar con el BBVA, un banco que te entiende, te conoce, y que te asegure el nivel de servicio y calidad es extraordinariamente valioso, y los empresarios que han apostado por internacionalizar sus negocios saben lo importante que es.

Además, compartir con ellos líneas estratégicas como el compromiso social y ambiental, y la apuesta por la digitalización, facilita mucho el trabajo y el entendimiento.

-También desarrollan proyectos medioambientales. ¿La sostenibilidad será a partir de ahora el eje central de cualquier infraestructura?

-Desde hace varios años desarrollamos proyectos medioambientales, tanto en la gestión y tratamiento de los residuos, como en el ciclo integral del agua. De igual manera cualquier otro proyecto ya incorpora la sostenibilidad como uno de los vectores esenciales en el diseño. En el sector y en la sociedad en general existe conciencia, pero con el esfuerzo de todos debemos conseguir que sea superior estos próximos años, y los fondos Next Generation deben ser una oportunidad.

En nuestra compañía existe una estrategia ESG bien definida, y en materia ambiental tenemos acciones e indicadores de seguimiento en el cumplimiento de los ODS definidos por Naciones Unidas. La propia metodología BIM por la eficiencia que conlleva contribuye de manera directa al ODS número 11, además contamos con diversas certificaciones ambientales.

-¿Les ha afectado la pandemia? ¿Qué previsiones tienen?

-Afortunadamente cerramos un 2020 superando tanto los objetivos del presupuesto como las cifras del 2019; a nivel consolidado hemos generado unos ingresos de 11,5 millones de euros para obtener un EBITDA de 2,3 millones de euros, y empezamos el 2021 con una cartera de proyectos firmados de 16,4 millones de euros.

Respecto las previsiones, a finales de julio del mes pasado, aconteció un hecho relevante y que formaba parte de nuestra estrategia, y es la entrada en el accionariado de NAZCA Capital, la gestora de fondos de capital privado líder en el mercado español en sector de las pymes. Gracias a ello, tenemos un ambicioso proyecto de crecimiento orgánico e inorgánico para conformar el primer grupo de servicios de ingeniería basados en BIM en España y Portugal, con presencia también en Latinoamérica.