Social Car: Mi coche es de todos

La economía colaborativa está ahora en boca de todos. Pero en el lejano 2011 el compartir era un verbo solo aplicado entre la gente con quien se tenía confianza. Fue en ese año cuando Mar Alarcón y Francesc Queralt cofundaron Social Car, una plataforma en la que los particulares podían poner su coche a disposición de otros usuarios en forma de alquiler. Esta start-up es la ganadora del Premio Digitaliza de los Premios Empresa del Año que organiza EL PERIÓDICO DE CATALUNYA.

"Comenzó siendo una simple aventura y ahora podemos decir que el coche compartido es una realidad", señala Alarcón a este diario. Social Car es hoy "un servicio normalizado" que ha evolucionado mucho desde sus inicios, a la par que la sociedad.

La 'start-up' nació como una plataforma donde un particular podía anunciar su vehículo y otros particulares podían ponerse en contacto con él para alquilárselo horas o días. "Empezamos con el modelo P2P -particular a particular-, pero hoy es más una modalidad de carsharing (coche compartido)", destaca. La empresa no tiene flota, ninguno de los coches anunciados está en propiedad, pero sí que han llegado a un modelo mixto: la gran mayoría son particulares que ofrecen sus vehículos, pero también cuentan con varios puntos en Barcelona, Madrid y Valencia para la entrega y devolución. "Hay propietarios que nos han confiado un centenar de coches. Nosotros gestionamos con tecnología su alquiler, y el que quiere el coche recibe una respuesta rápida y automática, sin tener que esperar a que el propietario acepte o no la petición", completa.

Además, ahora la plataforma también es un lugar en el que comprar y vender coches, y Social Car ofrece incluso una solución de renting de vehículos.

Alarcón sabe de primera mano cómo ha evolucionado el sector de la economía colaborativa. "Ahora hay mucha más gente que demanda este tipo de servicios de compartición, y sobre todo hay muchas menos dudas. Antes las llamadas para consultas duraban media hora, y ahora todo es más rápido. La gente tiene claro que los coches se pueden compartir, hay seguros adaptados a esta modalidad a todo riesgo...", destaca.

Otra señal de los nuevos tiempos es que en el accionariado de Social Car está, desde principios del 2017, el RACC. "Es la mejor señal de cómo estamos acompañando a un sector tradicional en su transformación", remarca. Otro de los sectores que acompañan en su modernización es el de los seguros.

Compartir de serie

De cara al futuro, Alarcón sigue viendo a su plataforma ofreciendo vehículos pero a un público mucho más acostumbrado a compartir el coche. "La opción de compartir coche vendrá incorporada en el propio vehículo de serie. Será el software del coche el que detecte que no vas a usarlo unas horas, y podrás ponerlo en alquiler ese tiempo en plataformas on line como la nuestra", avanza.

La compañía emplea a 12 personas, y cerró el 2018 con tres millones de euros de facturación. Cuentan con más de 20.000 vehículos anunciados en 600 ciudades de España, y 250.000 usuarios. "Nos centramos en España, es nuestro mercado y estamos cómodos", agrega. 

Alarcón, una de las 50 mujeres emprendedoras más influyentes de la industria el año pasado según EU-Startups.com, afirma que emprendió en Barcelona porque era de aquí, y que cuando comenzó el ecosistema era "muy pequeño". "Ahora emprender en Barcelona tiene muchas ventajas. Es un hub importante, hay capital, aceleradoras... Y lo más importante, hay mentalidad de emprender". Precisamente, lo que hizo en el 2011 con Social Car.