Resultados elecciones en Girona 2023: el PSC reconquista el fortín perdido en la era Puigdemont

Doble remontada la que ha experimentado este domingo la ciudad de Girona, con dos partidos que han pasado de seis a ocho concejales en las elecciones municipales pero con el PSC de Sílvia Paneque ligeramente por delante en número de votos respecto de la lista de Guanyem Girona, capitaneada por Lluc Salellas. En tercera posición, Junts, que se deja por el camino tres concejales (se planta con seis) con Gemma Geis como cabeza de cartel.

La 'exconsellera' de Universidades no ha logrado revalidar la alcaldía que en el año 2011 Carles Puigdemont consiguió arrebatar a los socialistas, que con Quim Nadal, que en estos comicios ha apoyado a ERC, habían comandado la ciudad durante un buen volquete de años. La actual alcaldesa, Marta Madrenas, que se hizo con la alcaldía en 2016 al substituir a medio mandato a Albert Ballesta, renunció a volver a presentarse. Esa decisión derivó en un problema interno en Junts después de que la elegida para relevarla, Assumpció Puig, tuviese que dejar el cargo por desavenencias con los dirigentes locales de Junts. Geis cogió el testigo.

Elecciones 28M en directo: última hora de la compra de votos, sondeos, encuestas y resultados

En cualquier caso, Paneque pasa de seis a ocho concejales y se hace con el 25,22% de los votos, frente al 23,31% de Salellas. El ocaso de Ciutadans, que ha logrado la friolera de 198 votos (0,57% del voto válido escrutado) ha propiciado la entrada en el pleno municipal de Girona del PP y de VOX, que acceden con un concejal por barba. Ambos partidos consiguen algo más del 10% de los sufragios, el doble que lo cosechado en las municipales de 2019. Los republicanos, por su parte, han perdido un concejal y, aunque siguen cuartos, ahora lo hacen con solo tres representantes.

Los pactos, o la ausencia de los mismos, decidirán ahora el devenir de la ciudad de Girona. Ya en 2019, Madrenas tuvo que formar un gobierno en minoría con tan solo nueve de los 27 concejales, al no conseguir el concurso de ningún grupo municipal de la oposición (todos votaron a sus respectivos cabezas de cartel) y sin que ningún otro aspirante alcanzara los 14 ediles suficientes para lograr la mayoría y arrebatarle el mando a la fuerza más votada. "Quedan bien lejos las mayorías absolutas, respetar los resultados electorales es la mejor manera de no traicionar el espíritu democrático", dijo la alcaldesa el 15 de junio de 2019, al ser investida. Está por ver si la historia se repite.