Cinco estudiantes comparten la nota más alta de la selectividad en Barcelona

Dos chicas y tres chicos han sacado un 9,90 en el examen de acceso a la universidad

El estudiante Martí Solà

El estudiante Martí Solà / periodico

Efe / ACN

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La nota más alta en las Pruebas de Acceso a la Universidad (PAU) es de 9,90 en la fase general, que comparten dos chicas y tres chicos de las provincia de Barcelona, ha informado la Secretaría de Universidades (SUR).

Las alumnas con mejor nota son Laia Marcos Cañal del INS Puig Castellar de Santa Coloma de Gramenet y Ada Munté Muñiz del INS Arnau Cadell de Sant Cugat del Vallès.

Los alumnos con la puntuación más alta son Pau Ortega Bartés del INS Antoni Pous y Argila de Manlleu, Gonzalo Plaza Arriola del Col·legi Sant Josep de Sant Sadurní d'Anoia, y Martí Sola Bertran, del INS Front Marítim de Barcelona.

Laia Marcos ha explicado que su nota final es un 13,96 por lo que podrá entrar a estudiar Medicina en la Universitat de Barcelona, que era su primera opción.

"Mi padre es físico y mi madre arquitecta, y siempre me han animado a estudiar asignaturas relacionadas con la ciencia", ha señalado la joven, aunque asegura: "He acabado decidiendo yo qué quería estudiar".

En cuarto de ESO se despertó su vocación por la ciencia, recuerda, y cree que "hay pocas cosas que puedan compensar tanto como ayudar a una persona y curarla si está enferma", ha expresado la joven, que ha estudiado en el instituto público Puig Castellar de Santa Coloma de Gramenet.

También con un 13,96 de nota final, Pau Ortega podrá estudiar el grado de Filosofía, política y economía que, de manera conjunta, imparten la Universitat Pompeu Fabra, Autònoma de Barcelona y la madrileñas Carlos III y Autónoma de Madrid.

"Es un grado polivalente, y como no tengo muy claro a qué dedicarme y me interesa todo, creo que puede abrirme muchas puertas", reflexiona este joven, que ha estudiado ESO y Bachillerato en el instituto Antoni Pous y Argila de Manlleu.

Además, es un grado "muy interesante desde el punto de vista de la movilidad", ya que parte de la carrera se estudia en Madrid, y en su caso deberá desplazarse a la capital española en segundo curso, cuando espera que "el tema de la pandemia esté controlado".

Como una de las materias optativas este estudiante se ha examinado de griego, una asignatura en la que ha obtenido la nota media más alta entre las específicas y que para él es "muy interesante porque enseña a pensar".

Nota de corte

Con un 13,96, Martí Solá podrá acceder a una de las 20 plazas del doble grado de Física y Matemáticas que ofrece la Universitat Autónoma de Barcelona (UAB), y cuya nota de corte es de un 13,4, "la más alta de Catalunya", ha resaltado el joven a Efe.

"Me gustan las dos materias, y por ello me decidí por esta carrera", ha explicado Martí Solá, quien cuando se publicaron las notas de selectividad, el pasado viernes por la noche, se encontraba con unos amigos y no quiso mirarlas, prefirió "dormir tranquilo" y mirar su resultado al día siguiente, al despertar.

A Martí, el hecho de quedarse en casa por el confinamiento le ha ayudado "en parte" a l'hora d'estudiar.

La joven Ada Munté con un 13,56, que ha estudiado en el INS Arnau Cadell de Sant Cugat del Vallés, quiere estudiar Comunicación Audiovisual en la Pompeu Fabra de Barcelona porque le gusta "contar historias" con cualquier formato, ha explicado a Efe.

La joven reconoce que al principio sus padres "no tomaron muy en serio" sus intereses pero, ahora, les parece bien lo que quiere estudiar.

Para Ada, el tercer trimestre virtual "supuso aprovechar más el tiempo de estudio en casa", mientras que el resto de alumnos han afirmado que "prefieren las clases presenciales".

Todos han coincidido en destacar la "dedicación y ayuda de sus profesores" en el final de curso y en que alargar un mes la convocatoria de selectividad "significó aumentar los nervios".

Las celebraciones por la buena nota obtenida "serán sobre todo descansando" ya que la pandemia limita la movilidad y se reconocen "agotados", han coincidido