Empresa expedientó al 74% de los comercios que inspeccionó durante el último Black Friday

De las 55 empresas que inspeccionó la conselleria de Empresa i Treball durante el Black Friday del año pasado, 41 habían incurrido en algún tipo de fraude. Esto, trasladado a porcentajes, significa que prácticamente tres de cada cuatro comercios (el 74%) engañaron de forma más o menos grave al consumidor durante este evento de compras que tan masivo se ha convertido en España. En concreto, la Direcció General de Comerç acabó abriendo expediente sancionador a 31 empresas por “competencia desleal” (y 17 se han resuelto con una multa total de 185.000 euros) y l’Agència Catalana de Consum está tramitando otros 9 por cuestiones relativas a la indicación de precios.

Así lo muestra el balance de actuaciones al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO. En él no se precisa hasta qué cuantía podrían elevarse las sanciones de Consum de terminar, todas, en multa, pero la referencia es que, en función de la gravedad de la infracción, las penas van desde los 10.000 hasta los 100.000 euros. Así pues, como máximo serán 900.000 euros.

El problema es que el antecedente fueron más de 1 millón de euros en multas en total a casi medio centenar de compañías por como gestionaron el Black Friday de 2022, y la situación no ha mejorado. De ahí que la Generalitat redoble la vigilancia y trabaje en campañas de difusión para tratar de hacer pedagogía de cara al cliente.

Movimientos del Govern

Respecto a lo primero, el departament de Empresa tiene ya las actuaciones de este año en marcha, esta vez sobre 80 compañías, casi un 50% más que en 2022 o 2023. El aumento se debe a que han vuelto al modelo de vigilancia que emplearon en la campaña de hace un par de años, que permite montiorizar de forma automática los precios en las distintas páginas web.

Las compañías vigiladas son empresas que se dedican a la venta de artículos de electrónica, ropa y complementos, productos para el hogar… y su plan contempla la inspección de 2.960 productos en total, de los cuales 2.660 se venden a través de internet y otros 300, en tiendas físicas. El seguimiento de sus precios se empezó a finales de septiembre y se alargará hasta el lunes 2 de diciembre, cuando termina oficialmente este evento consumista.

Hay que tener en cuenta que el evento oficial es el viernes 29 de noviembre, pero que la mayoría de comercios los activan una semana antes y, muchos, durante todo el mes. En cambio, la cita termina en todos los casos con el Cyber Monday, un evento originalmente pensado para dar continuidad al pico de ventas del Black Friday (cuando era cosa solo de un día), pero que ahora es el cierre universal de esta primera oleada de descuentos y rebajas pre-Navidad.

Lo que dice la legislación

“La legislación contempla obligaciones para las empresas y los comercios, como por ejemplo informar tanto del precio original como del precio rebajado o el porcentaje de descuento, teniendo en cuenta que el precio original sobre el que se hace la rebaja tiene que ser el más bajo que haya tenido el producto en este mismo establecimiento en los 30 días anteriores a la promoción”, teorizan desde la Agència Catalana de Consum.

Visto que este no es el caso, esta entidad ha puesto en marcha una campaña divulgativa en redes sociales, especialmente dirigida a la población más joven. El eslogan será ‘N’estem tips’ (apelando al hartazgo generalizado, pero jugando con la palabra ‘tip’, que en inglés quiere decir ‘consejo’). La idea es compartir información práctica para comprar de forma más responsable, pero también segura, este Black Friday. 

Sobre todo teniendo cuenta que esta campaña lo tiene todo de cara para ser una de las que más publico seduzca de los últimos años. Este evento de compras ya es, de base, el que más predisposición genera de entre todos los que conforman lo que se conoce como ‘trimestre dorado’ (los tres meses que suman el Black Friday, la campaña de Navidad y las Rebajas).

Según el barómetro que publican anualmente KPMG y Appinio, un 70% de los consumidores prevén, a estas alturas, comprar algo en esta campaña de descuentos, y los días previos de Navidad superan por poco el 50%. A este punto de partida, ya bueno, se suma que el cliente sigue muy interesado por el descuento por todo lo que arrastra, pero tiene algo más poder adquisitivo que los años previos (la inflación se ha suavizado y los sueldos han subido ligeramente). Este mismo estudio sitúa la previsión de gasto de este año en torno a los 350 euros. De ahí la voluntad de la Generalitat de proteger al consumidor.

En función de los consejos de l’Agència Catalana de Consum, las recomendaciones básicas son tener claro lo que se quiere comprar de antemano y haber comparado precios antes de adquirir el artículo, comprobar que la rebaja sea real fijándose en el precio anterior y no tirar tiques ni facturas.