Capítulo 2. El obrador

Antes, de las sobras de comida se hacían croquetas, potajes o torrijas... Estas son nuestras croquetas contra el derroche alimentario

Por María Jesús Ibáñez

Comida que acaba
en la basura

Un tercio de la comida que se produce en el mundo acaba desperdiciada. Y eso, como puedes imaginar, tiene unos efectos terribles en la economía, en la equidad alimentaria y en la sostenibilidad del planeta. El objetivo de la ONU para 2030 es que el despilfarro se rebaje a la mitad. Pero no va a ser fácil. Consciente del problema, EL PERIÓDICO quiere explicar con datos, imágenes y testimonios, qué podemos hacer cada uno para reducirlo.

En la elaboración o procesado de los alimentos se pierde casi el 24% de la materia prima, muchas veces porque el alimento base tiene una tara y se opta por tirarlo entero. En este episodio, vamos a visitar el obrador de És Im-perfect, una pequeña empresa con sede en El Prat de Llobregat, que elabora mermeladas, salsas, patés y compotas a partir de frutas y hortalizas que han sido previamente descartados en el campo o se habían clasificado como excedentarios.

Datos del sector

Mauricio, al frente de la cocina, usa un cucharón que más bien parece una pala para remover las cuatro grandes ollas que llevan rato haciendo chup-chup en el fuego. Hoy, en el obrador de És Im-perfect, están preparando compota de manzana y todo huele que es una maravilla. Una joven ayudante de cocina trabaja junto a él troceando la fruta. "Lo partimos todo, sin separar las semillas y el rabito, y se cuece todo junto... Luego, se tamizará y los restos que queden ya se separarán", explica Agustina Martínez-Vivot, educadora social y responsable del acompañamiento de los trabajadores de inserción que están empleados en la empresa.

"Trabajamos con productores locales, que nos venden frutas y hortalizas excedentarias o de merma, sobre todo los que no tienen el tamaño o la forma estándar para ser puestos a la venta. Y eso, claro, al ser siempre de temporada, nos marca también a nosotros el calendario de producción", prosigue Martínez-Vivot. En 2022, la firma trató con 109 toneladas de productos frescos y los transformó en 404.000 botes de mermeladas, patés, salsas y cremas que comercializó bajo su propia marca. "Como somos también una empresa guiada por la justicia alimentaria, llevamos ya un año y medio con los precios congelados", subraya.

Una parte importante del negocio de la empresa, que muy pronto se trasladará a una nave industrial de 1.000 metros cuadrados en El Prat, pasa por la elaboración de productos por encargo. "Trabajamos con cooperativas y colaboramos en el proyecto Food Back de Mercabarna, en el que los mayoristas que tienen algún producto excedentario, lo ceden para poder darle una salida y donarlo a entidades sociales… Ahora mismo, por ejemplo, estamos haciendo mermelada de mango con esos sobrantes", explica la educadora social.

És Im-perfect, igual que su empresa madre, la Fundació Espigoladors, no hace más que, en el fondo, recuperar antiguos usos, recuperando y dando una segunda vida a los alimentos. "No hemos de culpar de todo lo que pasa a los que están al final de la cadena, que son los hogares", afirma Raquel Díez, directora de las dos entidades. Se trata, añade Díaz, "de buscar complicidades, de ayudarles a decidir qué compran y cómo lo compran".

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Consejo

Guarda los tomates del
revés, con el rabito (también
se le llama péndulo) o la
parte más dura hacia abajo.
Si no les toca el aire por
ahí, se consigue que
madure menos rápido.

Consejo

Guarda los tomates del revés, con el rabito (también se le llama péndulo)
o la parte más dura hacia abajo. Si no les toca el aire por ahí,
se consigue que maduren menos rápido.

Un reportaje de El Periódico

Textos: María Jesús Ibáñez
Ilustraciones: Andrea Hermida-Carro
Imágenes: Manu Mitru
Coordinación: Rafa Julve