Catalunya ya ha sacrificado más de 2.500 vacas por la dermatosis nodular, que suma 18 brotes

La crisis de la dermatosis nodular contagiosa (DNC), una enfermedad vírica que afecta al ganado vacuno y que en las últimas tres semanas se ha propagado a gran velocidad por granjas de Girona, ha sumado este viernes un nuevo positivo, con la confirmación de un nuevo brote en una granja de Castelló d'Empúries (Alt Empordà). Con ello ascienden ya a 18 las explotaciones de bovinos contagiados desde que se detectó el primer caso de la enfermedad el pasado 3 de octubre en el mismo Castelló. La Generalitat, que está analizando las muestras tomadas en otras cuatro explotaciones sospechosas, ha levantado las restricciones que el martes aplicó en la comarca de Osona (ya en la provincia de Barcelona), donde finalmente los tests realizados al ganado han dado negativo.

"En Osona el problema que más preocupa en este momento es el de la gestión de los purines, ya que allí es más difícil tratarlos", ha observado Raquel Serrat, coordinadora del sindicato agrario Unió de Pagesos, mayoritario en Catalunya. La organización denuncia "la falta de prevención y la mala gestión" ante los casos de DNC que ha hecho el Govern de Salvador Illa, al que pide intensificar la campaña de vacunación del ganado. Según sus estimaciones, ya se han sacrificado más de 2.500 reses.

Mientras tanto, el equipo de 60 veterinarios que ha contratado la Conselleria d'Agricultura ha administrado ya vacunas a un total de 125.000 cabezas de ganado en tres zonas perimetradas: Castelló d'Empúries (Alt Empordà), Cassà de la Selva (Gironès) y la frontera con Francia (comarcas de Cerdanya, Ripollès y Berguedà). Catalunya ha enviado este viernes también un nuevo plan vacunal al Ministerio de Agricultura y a la Comisión Europea, en el que se reclaman 140.000 nuevas vacunas para los próximos días y hasta 250.000 viales más durante la primera semana de noviembre. "En estos momentos, se están pidiendo inmunizaciones para medio millón de animales, ya que también vamos a pedir que se vacune en granjas del Pirineo y de Lleida, y el Gobierno de Aragón se ha sumado a la solicitud para los territorios fronterizos con Catalunya", explica Serrat.

"Mensaje de tranquilidad"

Pese a la velocidad a la que se está propagando el virus, que no se contagia a los humanos, el Ministerio de Agricultura, a través de su titular Luis Planas, ha estado lanzando esta semana mensajes "de tranquilidad". Planas aseguró el pasado martes, tras exponer la situación en el Consejo de Ministros, que estos casos "se tratan con determinación, eficacia y coordinación entre el gobierno y las comunidades autónomas, en colaboración con la Comisión Europea y con la Organización Mundial de la Sanidad Animal", según explicó en la rueda de prensa posterior al encuentro ministerial.

En todo caso, prosiguió Planas, los ganaderos afectados podrán acogerse a las líneas de ayudas que para este tipo de situaciones prevé la Comisión Europea, que contempla la posibilidad de indemnizaciones por sacrificio de ganado.

La DSC, que según se ha confirmado ya llegó a España procedente de Francia, se detectó por primera vez en ese país el 29 de junio de este mismo, en la región de Saboya, cercana a Italia. Esta enfermedad viral, muy perjudicial para el ganado y potencialmente mortal, provoca importantes pérdidas de producción en los rebaños infectados. Su tasa de mortalidad, con fiebre, nódulos e hinchazón, ronda el 10%, pero el principal problema es que además afecta a la fertilidad de las vacas y la producción de leche, que pueden disminuir drásticamente en los animales que la contraen sin morir.

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