Entrevista | Pablo de Ramón-Laca
Pablo de Ramón-Laca: "Nuestra utilidad aumenta con la incertidumbre"
Pablo de Ramón-Laca, presidente de Cesce, explica los retos del grupo asegurador y exhibe optimismo ante el buen momento de la economía española
Pablo de Ramón-Laca releva a Fernando Salazar y será el nuevo presidente de Cesce
Ricardo Santamaría (CESCE): “Confío en que antes o después las empresas españolas podrán recuperar el negocio que tenían en Argelia”

El presidente de Cesce, Pablo de Ramón-Laca, en la sede de la compañía en el passeig de Gràcia de Barcelona / MAR ARMENTEROS


Albert Martín
Albert MartínCorresponsal económico de EL PERIÓDICO
Corresponsal económico de EL PERIÓDICO
Pablo de Ramón-Laca es desde septiembre del pasado año presidente de Cesce y eso explica que aún no hubiera admirado las vistas de la sede barcelonesa de la compañía, que dan directamente a la Casa Batlló. Durante su encuentro con ACTIVOS, el directivo repasa los grandes retos de la compañía y se felicita por el buen momento exportador de las empresas españolas.
¿Cómo definiría Cesce?
Cesce es un grupo empresarial público-privado que aporta soluciones de seguros de crédito a la exportación y de seguros de caución a empresas, que tiene desde el 1971 el mandato para asumir riesgo en nombre del Estado. Es también la agencia de crédito a la exportación en nombre del Estado. Pero el 85-90% del negocio de Cesce, de las primas que recibimos, y en torno a dos tercios del resultado, es por cuenta propia. Es una compañía que compite en igualdad de condiciones y cuchillo en boca en crédito y caución con las empresas del sector. Y entre un 10 y un 15% de la facturación viene de los riesgos que asumimos para que el Estado ayude a empresas a internacionalizarse. Y además, somos un grupo empresarial que incluye conocidísimas empresas como Informa, líder en información financiera. Y tenemos filiales en países como México, Perú, Chile, Brasil y Colombia.
¿Cuántos trabajadores tiene Cesce?
Pues 1.452, tenemos. Y en España tenemos unos 395.
Tienen una visión privilegiada para ver qué tal están las empresas españolas. ¿Cómo ven su salud?
Las empresas españolas pasamos la última crisis [se refiere a la del 2008] mejorando la competitividad de las empresas. Como no podemos devaluar [la moneda], salimos exportando y nos hemos vuelto más competitivos. Estamos ya ganando concursos internacionales. Y antes nos sorprendía ganarlos, pero ya no. Ahora somos un exportador estructural y eso solo se consigue con empresas competitivas.
¿Y por dónde tiene que pasar el siguiente salto?
En mi humilde opinión, tenemos que exportar a mercados adicionales a los tradicionales. El mundo es cada vez más incierto y la incertidumbre se palía diversificando. Hay que explorar y buscar destinos adicionales. Y esto, en el mundo que tenemos ahora mismo, si vas a exportar a China, a India, a países de África, al resto de Europa, a Latinoamérica, es arriesgado y por eso decimos que la competencia de Cesce no son tanto otras compañías como el autoseguro. El autoseguro funciona cuando una empresa tiene una posición de tesorería más alta de lo que tendría por si surge un imprevisto, por si surge un riesgo. Así que el próximo paso que tienen que dar las empresas es saber utilizarnos.
¿Hay algún sector de la economía española que les preocupe?
Los sectores más obvios son los expuestos a los últimos aranceles. El sector del acero, el sector del aluminio, el sector del vino y del aceite, por ejemplo. Ahora bien, son empresas muy competitivas. Lo que estamos apreciando es que estas empresas están más concienciadas que antes de los riesgos y están preguntando más por cómo cubrir estos riesgos. Estamos detectando un aumento de la demanda de apoyo por cuenta del Estado, y eso nos ha llevado a aumentar el techo de riesgo que el Estado nos permite asumir en su nombre, de 9.000 a 15.000 millones de euros.
¿Les preocupa a las empresas que podamos pasar de cuatro a tres grandes bancos en España?
No, yo no percibo esa preocupación. Tenemos que tener el número de bancos suficiente para que los servicios que aportan esos bancos a pequeñas y medianas empresas se den en todo el territorio, para que eso no se vea afectado. Tanto el BBVA como el Banc Sabadell son accionistas de Cesce y, si se llegaran a fusionar, no llegarían a ser primer accionista, que seguiría siendo el Santander. Y debo decir que Cesce es tan rentable que nadie vende. Desde la aportación inicial de capital en 1971, hemos dado dividendos todos los años, en todas las crisis, excepto en dos años, 1977 y 2008.
¿Tienen algún rasgo diferencial las empresas catalanas?
Son grandes exportadores. Las empresas con sede en Catalunya, exportan el 26% de todas las exportaciones totales españolas. Catalunya tiene empresas con vocación exportadora, son muy competitivas, muy adaptables, rápidas, resilientes. Y esto es el carácter catalán comerciante. Y, de hecho, con la incertidumbre reciente, han aumentado más que la media del país: han crecido un 1,2% y la economía española ha aumentado un 0,8%.
¿Cómo valora la implementación de Cesce aquí en Cataluña?
Bueno, es la segunda dirección territorial del país. La principal es en el centro, por supuesto. Y tenemos aquí muchos empleados. También damos apoyo a empresas catalanas desde aquí por cuenta del Estado y tenemos una delegación de Informa. Pero la implantación del grupo en Barcelona es importante, es prioritaria.
¿Hasta qué punto deben preocuparnos el contexto geopolítico y los conflictos militares?
Los conflictos y la incertidumbre siempre son dañinas para la exportación. Si yo dijera que el negocio del seguro mejora con la incertidumbre, sería un poco cínico, pero lo cierto es que nuestra utilidad aumenta con la incertidumbre. Y el hecho de que sea una empresa con mayoría pública hace que en este contexto tenga un hecho diferencial, porque la función de Cesce es más amplia que la de una empresa que busca el beneficio.
¿Le consta si hay empresas que ya han notado los aranceles?
No, todavía es pronto para decir eso. El ministerio ha hecho una encuesta muy grande a través del ICEX para preguntarles como se están viendo afectadas y están recabando información. Lo cierto es que los vaivenes, poner aranceles, quitarlos, suspenderlos temporalmente, cuando ves que empeoran todas las bolsas… Eso no ayuda porque reduce y retrasa decisiones de inversión.
¿Cómo se explica la decisión de Trump de cuestionar un pilar del liberalismo como es el libre comercio?
Lo que hemos visto últimamente es la ruptura de un paradigma que se ha estado tensionando durante décadas. El libre comercio como paradigma se ha visto cuestionado en hasta tres ocasiones. En la crisis asiática [de 1997], países que creían en la globalización y que tenían déficits para crecer confiaron en que los mercados internacionales financiarían su crecimiento, pero se vieron sin divisas y sometidos a programas muy estrictos del FMI.
Después vino la crisis de las subprime [en 2008]. En los países con déficit, que eran la mayoría de los occidentales, la carga la compartieron inversores y deudores. Y eso en la crisis asiática no había ocurrido. Y claro, lo que pensaron los países del sur global es que el multilateralismo estaba al servicio de Occidente. Y después con la crisis del covid [2020] y con la invasión rusa de Ucrania [2022] se empezó a pensar en autonomía estratégica, que también cuestiona ese paradigma.
Y bueno, a más largo plazo, el ascenso de China, que no pide disculpas por su modelo tecnocrático y eso tensiona también la creencia en valores democráticos.
¿Qué cree que tenemos que esperar a nivel macro?
Yo veo que el crecimiento de España es robusto porque es más equilibrado que la última vez. Yo era el que vendía la deuda española en la última crisis. Entonces yo iba hablando a fondos de inversión. Y lo que te decían es que cuando tu sector privado debe el 217% del PIB, el sector público no debe el 35% del PIB. Nosotros pensábamos que éramos triple A en el año 2008, y no. ¿Por qué? Porque el sector público iba a tener que endeudarse para cubrir las deudas del privado.
Ahora hay más endeudamiento público, es verdad, pero mucho menos endeudamiento privado. Y esto es lo que consigue que las empresas puedan salir a competir porque tienen menos carga.
Ahora bien, depende mucho de nuestros socios comerciales. Depende de qué haga Alemania, pero Alemania va en la buena dirección, creo, aceptando la necesidad de invertir para salir de su crisis.
¿Nos podría contar alguna vivencia de la época en que vendía deuda española?
Fue una experiencia vital. El que te va a comprar la deuda es el que te la va a comprar en el próximo ciclo y nunca, nunca se le miente. Siempre se le dice la verdad. Y había un diálogo paralelo entre lo que se habla con inversores y lo que entra en el ámbito político. Son compatibles entre sí, pero son horizontes distintos. El diálogo con los inversores internacionales ha sido siempre muy franco y eso es lo que nos ha permitido hacer las cosas bien.
Desde que nos dimos cuenta que no éramos triple A en 2008, todas las reformas han ido en la dirección correcta, de aumento del poder adquisitivo, de reformas laborales, del sector financiero, y eso ha resultado en el reequilibrio del balance del país, con el desapalancamiento del sector privado a costa del reapalancamiento del sector público.
Los momentos iniciales del covid tuvieron también su complejidad. Cuando se decreta el confinamiento agentes del mercado tenían dudas sobre la celebración de las subastas. Nosotros, desde el Tesoro, teníamos claro que era fundamental salir a los mercados. Porque estos son los momentos en los que hay que endeudarse. Y ¿a quién pides prestado? A las futuras generaciones, a través de los bancos centrales.
¿Por qué el mundo de las aseguradoras le gusta tanto pasar inadvertido?
Nuestro objetivo es contener los siniestros, pero al mismo tiempo contratar seguros. Eso llevas a querer pasar inadvertido. En Cesce tenemos una función muy importante: permitimos que la tesorería de las empresas se utilice de forma más eficiente porque estamos haciendo un pooling de riesgos. Y por eso cuanto más amplia sea nuestra base de clientes, más eficiente es la economía.
"El caso Koldo nos entristece, pero no nos afecta porque hay controles"
¿Qué peculiaridades tiene la gestión de una empresa donde el Estado tiene más del 50% de las acciones?
Somos una sociedad mercantil estatal que da beneficios y que compite en el mercado. Eso te da cosas buenas, por ejemplo que tienes un horizonte muy largo. Tienes un accionista que le importa algo más que el dividendo. Y es verdad que es difícil retener el talento, pero lo conseguimos a base de ser una empresa que trata muy bien a sus empleados.
Últimamente hay muchas voces que cuestionan que el gobierno de España esté siendo especialmente intervencionista en el ámbito económico. ¿Lo comparte?
Yo he trabajado con varios gobiernos y no he visto un cambio, una evolución tan notable. Desde el covid ha habido una tendencia a que el Estado proteja más los empleos y se ocupe más del bienestar de las empresas y de las personas. Porque ha visto que funciona, que se puede hacer y que es mejor eso que lo que se hizo al principio de la crisis de Lehman [en 2008] y al principio de la crisis de 2011. Pero no aprecio una diferencia grande desde el punto de vista ideológico entre tipos de gobierno.
¿Afecta a una empresa semipública el caso Koldo?
Nos entristece, pero no nos afecta porque hay controles.
Suscríbete para seguir leyendo
- Encuesta CEO: El apoyo a la independencia de Catalunya se recupera por primera vez en año y medio
- Barcelona activa una alerta por noches tórridas ante la previsión de que los termómetros no bajen de los 26 grados
- Gonzalo Bernardos: 'La burbuja inmobiliaria tuvo lugar porque los bancos se volvieron locos y generaron una demanda absolutamente artificial
- Muere una mujer durante la primera noche del festival Tomorrowland
- Tres hermanos buscan a su madre, desaparecida en el aeropuerto de Madrid: 'Tenemos la esperanza de encontrarla con vida
- Niño Becerra (74 años) sobre el precio de la vivienda y el alquiler: “Dejarán de subir cuando la demanda no pueda pagar más”
- Los abogados españoles adoptan la práctica anglosajona del pro bono: crecen los despachos que atienden casos gratis
- Suelo de paja, hoteles para insectos y un nuevo molino de 25 millones de euros: así hace Casa Tarradellas la harina de sus pizzas